El diferendo entre trabajadores y patronal de la minera Escondida, Chile, la mayor productora de cobre del mundo, se mantiene hoy estancado después de un fallido intento de diálogo la víspera.
De tal forma, la huelga, ya con casi 13 días de iniciada, persiste con más de dos mil 500 trabajadores en paro y el gran yacimiento del metal rojo, en la norteña región de Antofagasta, sin movimiento.
La discordia entre la administración de la firma anglo-australiana BHP Billiton y los operarios mineros trajo como consecuencia la inestabilidad en los precios del cobre en el mercado internacional, con tendencia al alza.
“La compañía continúa en su postura intransigente, por lo tanto ya no hay nada que conversar y nosotros volvemos al campamento”, declaró a la prensa el vocero principal del sindicato de trabajadores de la mina, Carlos Allendes.
Allendes y varios de sus compañeros del gremio se reunieron la semana pasado con la ministra del Trabajo, Alejandra Krauss, para explicarle las razones del paro, relacionadas con un bono y mejoras salariales.
En días recientes, los dirigentes sindicales de Escondida acusaron a BHP Billiton de querer criminalizar la huelga legal y desoír sus demandas.
Consideraron que la empresa gana sin producir. “Estas compañías de capitales extranjeros lo único que hacen es introducir cláusulas abusivas para abaratar la mano de obra y quedarse con las utilidades”, denunciaron.
La mina que produce un promedio mensual de 100 mil toneladas de cobre, ya impactó con la huelga al mercado mundial de este metal, rubro principal de exportación de Chile.
Santiago de Chile, 21 de febrero 2017
Crónica Digital /PL