Crítica de Teatro
Por Miguel Alvarado Natali
“Mónica 1984”, es un drama musical centrado en el asesinato de Mónica Briones, artista chilena que declaraba abiertamente su lesbianismo y quien tuvo de profesor en la Escuela de Artes de la Universidad de Chile, a Nemesio Antúnez. La noche del 9 de julio de 1984 fue asesinada por un hombre desconocido, pero con características de ser un CNI, quien la insultó y golpeó hasta provocar su muerte. Escrita por Tatiana Baeza y dirigida por Evaluna Valdivieso, las cuales van a completar la trilogía de los montajes anteriores de Teatro La Crisis: “Las Convocadas: Manifiesto de una joven lesbiana en busca de justicia” (2020) y “Cuando se rompa el silencio” (2023). Las presentaciones serán hasta el 14 de julio en el Teatro Del Puente.
Corría el verano de año 1984 y Mónica Briones viaja como todos los años a la playa de Horcón. Allí conoce a otros veraneantes homosexuales que, como ella, intentan disfrutar la vida fuera de la clandestinidad del deseo. Ella mira el mar con dulzura y temor por los cuerpos que el océano se ha llevado. Al regreso a Santiago va canalizando sus sueños de artista, se topa con un nuevo amor y disfrutando de los entornos del Parque Forestal. En la celebración de su cumpleaños número 34 se desencadena una seguidilla de hechos que van a terminar trágicamente con su vida.
La escenografía es esencialmente funcional, excelente idea de las planchas de zinc al fondo del escenario a las cuales le adaptaron ampolletas. Un arrimo que soporta una planta suculenta verde, en tanto, las tres alfombras vintage distribuidas sobre el escenario le dan un aire ochentero. La silla de playa y el ventilador, serán consecuentes para evocar el sonido del mar en la playa y el viento que sopla las hojas en el Forestal. El vestuario muy bien elegido nos llena de esa atemporalidad que la obra requiere, mientras los instrumentos musicales junto al elenco van ocupando el espacio escénico llamativo y atractivo visualmente para el público.
Más que notables es la actuación de todo el equipo. Logran dar con una presentación potente, entretenida y llamativa, donde el eje principal es la música que va ayudando a una narrativa llena de matices que escarba todos los actos de la historia, la cual nunca decae. Aquí no hay espacios de aburrimiento, es tan bueno el ritmo que consigue esta performance, que nos llega de sopetón este desenlace – que sí bien lo sabemos- nos congoja, esa mezcla de diálogos casi poéticos con la melodía de una trompeta que señala la despedida, la muerte y la injusticia.
Este concierto teatral que nos pasea por el rock and roll y el twist, es emotivo y lúdico. Hay un gran cuidado en la recreación, donde se van sucediendo los actos que te envuelven en una trama de un episodio más de lo que fue el manto de la dictadura por sobre estos personajes sexodisidentes. Es un montaje conmovedor y vigente, que va bordeando ese despertar lésbico adelantado a su época y que nos lleva a la reflexión eterna de “Para que nunca más en Chile”, donde no solo la persecución fue política, sino que además por una orientación sexual determinada.
Dirección escénica: Evaluna Valdivieso y Tatiana Baeza-Fariña. Dramaturgia: Tatiana Baeza-Fariña. Dirección musical: Aníbal Gutiérrez.
Composición musical: Teatro La Crisis.
Elenco: Carla Baeza, Aníbal Gutiérrez, Bárbara Mártin, Florencia Cárdenas, Matías Silva, Alberto Villarroel.
Diseño Integral: Amanda López y Tifa Hernández. Producción: Evaluna Valdivieso. Gestión y comunicaciones: Agencia Rizomas
Santiago de Chile, 11 de Julio 2024
Crónica Digital
