La Cámara de Diputados prepara condiciones desde hoy para sesionar el 4 de julio en áreas de los manantiales del Silala, en un acto de reivindicación de la soberanía sobre esos recursos hídricos en disputa con Chile.
El diputado Víctor Borda explicó que esa actividad parlamentaria servirá para que el mundo conozca la posición de la nación andina-amazónica en torno a la actitud abusiva de Chile en este tema.
“Vamos a sesionar en el Silala y obviamente vamos a sacar algún tipo de pronunciamiento respecto a la demanda que nos ha iniciado Chile, y después presentaremos el documento a la Cancillería del Estado Plurinacional”, explicó.
De acuerdo con diversos estudios, cada un segundo 180 litros del vital líquido pasan al lado chileno, donde son utilizados para abastecer a varias ciudades, e incluso, para empresas mineras.
Según Chile, el Silala es un río internacional que atraviesa la frontera común, mientras que Bolivia mostró que los manantiales del departamento de Potosí fueron desviados mediante canales artificiales al territorio vecino.
En abril de 2009, ambos gobiernos llegaron a un preacuerdo, en virtud del cualChile se comprometió a pagar por el uso del 50 por ciento de las aguas de esa vertiente, mientras se realizaba un estudio hidrológico profundo.
Pero el convenio nunca se cumplió y finalmente fue descartado cuando en 2010 ese país decidió interrumpir las negociaciones de una agenda de 13 puntos sobre problemas pendientes, donde se incluían los recursos hídricos compartidos.
Las aguas del manantial del Silala abastecen sin contraprestación alguna hace más de 100 años a varias ciudades del norte de Chile.
El presidente de la Cámara de Senadores José Alberto Gonzales informó recientemente que la deuda de Chile por el uso de las aguas de los manantiales del Silala asciende aproximadamente a mil millones de dólares.
Gonzales basado en un estudio realizado por el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología de Bolivia, explicó que el preciado líquido abastece varias ciudades del norte de Chile y al emporio cuprífero de Chuquicamata sin que medie retribución alguna.
“Casi 900 millones de dólares calculados al año 2000. Si le agregamos estos 16 años más estamos hablando de una cifra que supera ampliamente los mil millones de dólares estadounidenses, ese es el monto que Bolivia nunca percibió por el uso de las aguas del Silala”, dijo.
Gonzales precisó que según ese estudio que se hizo en el año 2000, establece que son 4,8 millones de metros cúbicos consumidos por año, lo que significa que desde 1908 hasta ese año, el consumo asciende a 449,7 millones de metros cúbicos.
A un precio de dos dólares por metro cúbico asciende a un importe de aproximadamente 899 millones de dólares, “casi 900 millones de dólares calculados al año 2000, añadió el senador.
La Paz, 29 de junio 2016
Crónica Digital / PL