El controvertido diálogo impulsado por el presidente de Chile, Sebastián Piñera, con los partidos de oposición, continuará hoy en el Palacio de La Moneda con encuentros con líderes del Frente Amplio.
Los contactos, que comenzaron la pasada semana con entrevistas del mandatarios con los presidentes de los partidos Radical, Socialista, Por la Democracia y Democracia Cristiana, comienzan esta semana en medio de un nuevo panorama que puede ponerle las cosas más difíciles al Gobierno.
Esto se debe a que la víspera las bancadas de la oposición firmaron un documento con compromisos concretos para actuar en conjunto ante una serie de proyectos de leyes considerados esenciales por el ejecutivo para continuar adelante con su gestión pero muy cuestionados en medios políticos y sociales.
Precisamente, uno de los objetivos que persigue el mandatario con esta actitud supuestamente dialogante es conseguir la división de sus oponentes, que cuentan con mayoría en ambas cámaras, para poder sacar adelante esas iniciativas.
De entrada, algunos partidos rechazaron la iniciativa, como el Comunista, cuyo presidente, Guillermo Teiller, advirtió que el lugar más adecuado para dialogar es el Congreso, pero otros la aceptaron con una mezcla de suspicacias y esperanzas de un cambio real en la actitud de La Moneda, que hasta hace muy poco acusó a sus opositores de antipatriotas e intransigentes.
Pero al parecer tales esperanzas se han ido desvaneciendo tras los primeros contactos, a juzgar con lo expresado por los líderes de los partidos socialista (PS) y Democracia Cristiana (DC) que evaluaron negativamente los resultados de sus respectivas reuniones.
Al respecto, Álvaro Elizalde, presidente del PS, declaró a periodistas que “el diálogo implica escuchar a quienes piensan distinto y (el gobierno) ha dado un verdadero portazo a la voluntad de entendimiento”.
Por su parte, Fuad Chaín, cabeza de la DC, dijo que “no se puede invitar a dialogar para imponer”, agregó que no se ha visto que se acoja algunos de los planteamientos hechos por su agrupación, y criticó que el gobierno “sigue empecinado en sacar su agenda adelante”.
Al encuentro previsto para esta tarde acudirán, en conjunto, los máximos dirigentes de los partidos Comunes, Ecologista Verde y Revolución Democrática, que tampoco parecen tener grandes expectativas.
La presidenta de Comunes, Javiera del Toro, dijo esperar que la invitación a conversar sea más que un gesto y una formalidad, y realmente signifique un giro en la posición del ejecutivo, porque el objetivo debe ser “producir acuerdos sustantivos que permitan efectuar reformas que respondan a las necesidades del país”.
De otro lado, Juan Ignacio Latorre, de Revolución Democrática, señaló que hasta ahora solo percibe “una actitud rígida, obtusa por parte de la derecha de querer llevar a cabo su agenda de manera populista”.
Santiago de Chile, 3 de abril 2019
Crónica Digital /PL
