La marcha convocada en Argentina por la muerte del fiscal Alberto Nisman para el miércoles 18, y que ha sido capitalizada totalmente para fines políticos por la oposición, suscita hoy críticas también de agrupaciones judías locales.
Los que hoy piden respeto nunca lo tuvieron por quienes murieron en la voladura en 1994 de la asociación hebrea AMIA, afirmó Sergio Burstein, titular de la agrupación judía 18J que agrupa a sobrevivientes, familiares y amigos de las víctimas, al referirse a los fiscales que convocaron la manifestación.
Burstein, cuya organización ha venido reclamando desde hace años que se conozca la realidad del trágico acontecimiento, manifestó estar confundido y dolido, al asegurar que “muchos de los que la convocan tuvieron una actuación deplorable en la causa Amia”.
La convocatoria formal a la llamada Marcha del Silencio la hicieron el pasado viernes los fiscales Guillermo Marijuan, José María Campagnoli, Ricardo Sáenz, Germán Moldes, Carlos Rívolo, Raúl Pleé y Carlos Stornelli. Se les sumó Julio Piumato, cabeza del opositor gremio de trabajadores judiciales.
El titular de 18J manifestó que “si bien todo es válido en memoria de Nisman, duele comprobar que se sigue utilizando su muerte con otras finalidades que están muy lejos de la verdadera búsqueda de justicia”.
Cuestionó en particular a Plée, sospechado por no impulsar una acusación contra los encubridores del atentado, o el fiscal ante la Cámara Federal, Germán Moldes, quien está acusado en espera del juicio por encubrimiento en la voladura de la AMIA.
A la pregunta ¿Está de acuerdo con la marcha de los fiscales? En una encuesta que realiza el portal de noticias Infonews, el 91 por ciento de los mil 361 lectores que respondieron hasta el filo de la medianoche marcaron que no.
Diana Malamud, integrante de Memoria Activa, otra organización de familiares y víctimas de la AMIA, denunció que “no queda claro el motivo de la convocatoria porque si los que deben hacer justicia piden justicia; eso llama la atención”.
Malamud, quien perdió a su esposo en el atentado, cuestionó también el reclamo que hacen Moldes y Pleé, denunciados en 2013 por el Centro de Estudios Legales y Sociales, y Memoria Activa por demorar la incriminación de los acusados de encubrimiento de la voladura de la AMIA.
El galardonado escritor argentino Mempo Giardinelli es aún mucho más duro contra los convocantes y adherentes a la marcha. En un editorial llamó a los fiscales “autoritarios, nostálgicos de la dictadura, antidemocráticos y ahora golpistas”.
“Farfullan libertad e independencia -dos vocablos sagrados, que ofenden a coro de un periodismo miserable-, pero son golpistas”, insiste el ganador del Premio Rómulo Gallegos.
Y encima apoyados por dirigentes políticos oportunistas y sin discurso propio, que avergonzarían hoy a personalidades como Raúl Alfonsín, Luis León y otros radicales honorables, igual que a socialistas consecuentes como Alfredo Palacios o Norberto Laporta, sostiene Giardinelli.
Crónica Digital, 10 de Febrero 2015