Chile aumentará en un 30 por ciento el número de pacientes que recibirán tratamiento contra el VIH-Sida, un anunció alentador pero sin demasiado entusiasmo ante la alta incidencia de la enfermedad.
El ministerio chileno de Salud (Minsal), ratificó hoy la iniciativa a propósito de la celebración mundial del Día Internacional de Acción contra el VIH-Sida, en el país austral donde hay alrededor de 45 mil personas infectadas.
Las estadísticas del Minsal subrayan que los guarismos globales incluyen la llamada “cifra negra”, a la sazón los ciudadanos que son portadores del virus sin saberlo y potencialmente ponen en riesgo al resto de la población.
En declaraciones a la prensa, el infectólogo experto en VIH, doctor Carlos Pérez, aseguró que el número de personas contagiadas aumentó en Chile en los últimos años, aunque se ha podido bajar la cifra de fallecimientos.
“Tenemos mejores tratamientos y a un mayor acceso a estos que, correctamente seguidos, permiten a los pacientes llevar una vida prácticamente normal”, explicó el especialista de la Red de Salud UC CHRISTUS.
El doctor Pérez apuntó que en esta nación sudamericana existe una cobertura bastante buena para enfrentar al VIH-Sida, aunque recalcó la importancia de la educación, adoptar las precauciones necesarias y no asumir el asunto a la ligera.
Las recomendaciones no han variado, es imprescindible mantenerse vigilantes, realizarse exámenes periódicos y quienes desafortunadamente contraigan la enfermedad, aplicar con rigor los tratamientos, añadió.
El primer caso de VIH-Sida en Chile se diagnosticó en 1984 en el Hospital Clínico de la Universidad Católica y aunque la evolución se ha comportado de manera favorable, también es cierto que la población afectada se incrementó.
Santiago de Chile, 1 de diciembre 2014
Crónica Digital / PL