Según el Centro Sismológico de la Universidad de Chile, el temblor ocurrió a unos 135 kilómetros de esta capital, donde de todas formas se sintió levemente. El hipocentro estuvo a 30,2 kilómetros de profundidad.
La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) afirmó que no se reportan daños a personas ni a infraestructuras, como tampoco alteración en los servicios básicos.
De acuerdo con la Onemi, se percibió con intensidad V de la escala internacional de Mercalli en Valparaíso, y IV en Viña del Mar.
Pero en la noche de ayer, a las 22:43 hora local, se sintió con fuerza un temblor de 5,7 grados, que impactó a las regiones de Coquimbo, Valparaíso, Metropolitana y O’Higgins, sin víctimas ni daños de consideración.
El epicentro, dijeron los expertos de la Universidad de Chile, estuvo en la costa, a 27 kilómetros al suroeste de Canela Baja, a una profundidad de 34,2 kilómetros.
En Santiago, particularmente, la sacudida fue violenta pero de escasos segundos.
Santiago de Chile, 12 de junio 2017
Crónica Digital /PL
