El arqueólogo y antropólogo estadounidense Tom D. Dillehay explicó hoy en una conferencia auspiciada por la fundación Imagen de Chile, que en Monte Verde se han registrado vestigios de hace por lo menos 18 mil 500 años.
Por una serie de accidentes geográficos, entre ellos capas de cenizas volcánicas y mantos de algas que de alguna manera llegaron a Monte Verde, se hallaron restos de carne de mastodontes y piel de guanaco, destacó el profesor Dillehay.
Los descubrimientos tienen cuatro mil años más que los más antiguos encontrados en América del Norte y hablan de una población que posiblemente procede de Siberia, aunque hay todavía muchos enigmas por descifrar.
Dillehay señaló que Monte Verde, dividido por un equipo de investigadores que encabeza, fue habitado por un grupo de 15 a 20 personas, y en el lugar se halllaron restos de piel y carne de animales y huesos.
También, remanentes de una choza, semillas, algas, tubérculos, e incluso una especie de centro medicinal con más de 28 plantas con propiedades curativas.
En esta zona, detalló el experto norteamericano, se han producido hallazgos de los nudos más antiguos del mundo, usados para sostener las paredes -probablemente de cuero- de la vivienda.
Sostuvo igualmente que confía en que el lugar sea reconocido en el futuro como Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, pero antes debe cumplir con una serie de requisitos de la agencia de Naciones Unidas.
Santiago de Chile, 19 de agosto 2016
Crónica Digital / PL