Científicos suizos advirtieron hoy que los gases utilizados para anestesiar en cirugías se están acumulando en la atmósfera terrestre, por lo que también contribuyen al cambio climático, aunque en menor porcentaje.
La investigación detectó los compuestos en lugares tan lejanos de un hospital como la Antártida; y reveló que durante la última década, las concentraciones de anestésicos como desflurano, isoflurano y sevoflurano han aumentado a nivel mundial.
Al igual que el bien conocido dióxido de carbono, los gases de anestesia permiten a la atmósfera almacenar más energía del Sol; pero a diferencia del CO2, los gases medicinales son extrapotentes en sus efectos de efecto invernadero.
El químico atmosférico Martin Vollmer, quien dirigió el estudio, señaló que un kilogramo de desflurano, por ejemplo, equivale a dos mil 500 kilogramos de dióxido de carbono en términos de potencial de calentamiento atmosférico.
En la investigación, Vollmer y sus colegas de los Laboratorios Federales Suizos para la Ciencia de Materiales y Tecnología informaron que en 2014 la concentración atmosférica de desflurano era de 0,30 partes por trillón (ppt).
Por su parte, el isoflurano, sevoflurano y halotano llegaron a 0.097 ppt, 0,13 ppt y 0,0092 ppt, respectivamente.
El dióxido de carbono -que llegó a 400 partes por millón el pasado año- es mil millones de veces más abundante que el más frecuente de esos anestésicos.
Los recientes hallazgos se publicaron en la revista Geophysical Research Letters, de la Unión Geofísica de Estados Unidos.
Berna, 8 abril 2015
Crónica Digital / PL