Dónde estás?… hace mucho que no se de ti y te extraño, quizás sea el tiempo que ha pasado el motivo por el que ya no hablamos, pero en mi mente te mantienes igual que hace….¿cuántos años ya?. La última vez que te vi ibas con las manos amarradas en tu espalda, la vista vendada y ropas sucias y un poco ensangrentadas…
Hace cuanto que no veo tu ojos, hace cuanto que no siento tu respiración, hace cuanto que no escucho tu risa… muchos años. Querido hermano, la vida te apartó de mi y por más que he buscado, aún no encuentro tu rastro… dime si tu me extrañas tanto como yo a ti.
Algunos me han dicho que no siga buscando, que no vale la pena, que que sólo me hago daño y daño alos demás, sin embargo para mi, saber que fue de ti me ayuda a vivir y descansar. No por olvidar se sanan las heridas y no por dejar de mirar se olvidan los dolores… yo sigo caminando y mirando en cada esquina, quizás en alguna de ellas pueda encontrar un rastro tuyo.
He caminado junto a muchos y creeme que ellos siguen a mi lado, estamos seguros que algún día te veremos nuevamente, que alguna noche sonará la puerta de casa y el metal de tu voz me llamará, creeme que no hemos dejado de buscarte, ha sido un largo camino y doloroso a ratos, pero ahi estamos, en cada esquina con la pregunta intacta…¿Dónde están?
Hoy te hemos recordado en todo el mundo y seguiremos haciéndolo, cada año, cada mes, cada minuto ya que formas parte de nuestras vidas, aunque no seamos familiares, aun que no me conozcas o yo no te conozca eres parte de mi… sin embargo al innombrable, nadie lo recuerda, quizás nosotros para celebrar su muerte.
Me gustaría contarte que tengo un hijo, que he cumplido la gran mayoría de mis sueños, que cada cierto tiempo mi mente vuela a lugares lejanos, a momentos pasados, a compañeros y compañeras que han quedado en el camino, que cada vez más, pienso que hemos sido traicionados por los mismos que ayer estuvieron a tu lado, a nuestro lado y que hace un poco más de dos décadas tomaron el poder… creeme que ya no es igual, nada es igual.
Querido compañero(a), hoy vuelvo a preguntar como desde hace muchos años atrás… ¿Dónde Están?
No tengo más que escribirte, quizás mi pluma ya no quiere seguir dejando rastros en este papel, quizás ya no puedo continuar escribiendo o simplemente no tengo más palabras…
¿Dónde Estás?
Texto: enviado a Crónica Digital por un compañero (a).
Santiago de Chile, 31 de agosto 2014
Crónica Digital