La deuda pública de España alcanzará en 2014 el 99,8 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), según las cuentas públicas presentadas hoy en el Congreso de los Diputados por el gobierno de Mariano Rajoy.
De acuerdo con las previsiones oficiales, incluidas en los Presupuestos Generales del Estado (PGE), la emisión bruta de deuda ascenderá el próximo año a 243 mil 888 millones de euros, frente a los 207 mil 174 millones presupuestados para este ejercicio.
Hasta ahora esa cifra (99,8 por ciento del PIB) se esperaba alcanzar en 2016, tal y como aseguró el Ejecutivo del derechista Partido Popular (PP) en el plan de estabilidad remitido en abril último a la Unión Europea.
La estimación para 2013, por su parte, sitúa la ratio entre deuda y PIB en el 94,2 por ciento.
Al cierre del segundo trimestre (hasta junio) la deuda de la cuarta economía de la zona euro sumó 942 mil 758 millones de euros (92,2 por ciento del PIB), un récord absoluto desde 2000, frente a los 804 mil 660 millones de hace un año, según datos del Banco de España.
La mayor subida correspondió a la administración central del Estado, con unos compromisos de 818 mil 375 millones de euros (80,1 por ciento del PIB), un 20,31 por ciento más que el registrado en junio de 2012.
Durante el primer año y medio de gestión del PP, la deuda pública trepó a un ritmo nunca visto en esta nación europea y superó los 20 mil euros por habitante. En esos 18 meses pasó del 70,4 al 92,2 por ciento del PIB, precisó el supervisor central.
Sólo al pago de intereses de los compromisos externos, el Tesoro Público destinará 36 mil 590 millones de euros en 2014 (3,5 por ciento del PIB), unos dos mil millones de euros menos que en 2013.
Las principales cifras de los PGE pasan por la vuelta de la economía española al crecimiento -aunque mínimo- con un avance del 0,7 por ciento, mientras que el desempleo caerá al 25,9 por ciento de la población económicamente activa, uno de los niveles más altos de la UE.
Estas previsiones mejoran las anteriores, que apuntaban a un crecimiento del PIB de 0,5 por ciento y una tasa de paro del 26,7 por ciento.
Para los principales partidos de la oposición, los duros recortes en el gasto social aplicados por Rajoy no están sirviendo para reducir el endeudamiento público, sino para causar mayores sufrimientos a los ciudadanos y agravar el crecimiento económico.
Presentados por la derecha gobernante como los de la recuperación económica, los presupuestos para 2014 se ensañan con los empleados públicos y los pensionistas, quienes verán nuevamente reducido su poder adquisitivo.
Santiago de Chile septiembre 30 de 2013
Fuente Prensa Latina
Crónica Digital