Crítica de Teatro:
Por Miguel Alvarado Natali
Rodrigo Bastidas está imparable después de entregarnos en los últimos años obras como “Viejos de Mierda” (2016), “Viejas de Mierda” (2019, “No me deje hablando solo” (2023), “Tres espermios desobedientes sin permiso de la mamá” (2023) y “Reunión de Apoderados” (2024) hoy actúa y dirige “Los emprendeudores” que escribió junto a Juan Bennett. En esta comedia, la cesantía de tres amigos que ya han pasado los 60 años, les comienza a pasar la cuenta. Se está presentando en el Teatro Mori Parque Arauco hasta el 26 de julio.
Tres amigos tienen montada una oficina en medio de una bodega y es ahí desde donde comienzan a planear cómo salir de su situación económica, que los ha pillado a sus 60 años, sin ahorros, sin previsión y desempleados. Con algo de ingenio se quieren reinventar y crean la insólita “Fundación de Cesantes”, donde los socios – que están también sin trabajo- deberán pagar cuotas, mostrando una vez más esa viveza del chileno y a un estilo de vaqueros del oeste.
Con una escenografía funcional, donde al centro del escenario hay un mesón con tres sillas que usan de escritorio. Se ven cajas arrumbadas y desordenadas por todos lados y las mochilas de sus notebook tiradas en el suelo. Mientras el fondo del escenario simula cuadrados de almacenamiento. El vestuario de vaqueros es creativo; sombrero, cinturón, chaleco, botas y hasta con funda y revolver cowboy.
En “Los emprendeudores” hay una dimensión sicológica y salud mental en la que tres personajes están sumidos, por estar cesantes. Esto los lleva a lo que no es nada extraño en Chile, emprender un negocio cueste lo que cueste y saltándose todos los aspectos éticos y morales. Con ironía y humor negro la obra va despejando la problemática que tiene cada uno de ellos. El actor Juan Bennet, es Carlos Morales, quien debe las pensiones alimenticias de los hijos de sus dos exesposas. Jaime Omeñaca interpreta a Carlos Bustos, el cual después de separarse ha vivido 15 años con su madre y por último tenemos a Carlitos, rol encanado por Álvaro Pacull. La trama va girando en torno a Carlitos, ya que a este lo dejó su mujer por un multimillorario (Rodrigo Bastidas), quien es clave en el desarrollo de la historia.
Es un montaje que escarba en esa precariedad y desigualdad, que se gesta cuando quedas cesante siendo un adulto mayor y hace un alcance a la edad y la tecnología que literalmente “los pillo”. Nos sumerge tibia y ligeramente en temas de política contingente y acá su director Rodrigo Batidas podría haber sido más atrevido con sus ironías. Por momentos con diálogos de un humor infantil, y otros muy bien logrados, como cuando uno de los personajes ha pensado hasta de pegarse un balazo, ya que a esta edad son desechados por la sociedad. Es una comedia divertida, que logra cautivar a los asistentes, cumpliendo el objetivo de entretener.
Dramaturgia: Rodrigo Bastidas y Juan Bennett. Dirección: Rodrigo Bastidas. Producción general: Paula Jullian. Técnica: Hans Horta. Duración: 75 minutos. Edad recomendada: +14 años.
Elenco: Álvaro Pacull, Jaime Omeñaca, Juan Bennett.
Santiago de Chile, 26 de junio 2024
Crónica Digital