Ernesto Gramsch, académico y experto en estudios medioambientales de la Universidad de Santiago, apuntó a que “donde hay se resuelve bastante bien el problema”. También analizó si también ayuda tener una mayor cifra de buses eléctricos en la Región Metropolitana.
El balance de este año sobre la contaminación atmosférica en la Región Metropolitana fue calificado como “pésimo” por parte de autoridades y especialistas, afirmando que ha sido el peor desde el 2008.
Misma mirada que tiene el académico y experto en estudios medioambientales de la Usach, Ernesto Gramsch, quien tiene claro cuál es la mayor deuda al respecto. “Una deuda bien importante es el transporte público que tiene que mejorar más en Santiago, para que la gente pueda optar a otras vías y deje los vehículos particulares”.
“Lo que está fallando ahí es el transporte público, el que tiene que ser más rápido y no lento, para igualar a los vehículos. Eso sumado a precios razonables”, complementó.
En ese sentido, el doctor en Ciencias con Mención en Física, apuntó a la importancia de crear más líneas del Metro. “Desafortunadamente Santiago es una ciudad muy chica en espacio y por lo tanto el transporte público no es muy eficiente, como las micros, por eso, probablemente la única buena solución a largo plazo es construir más líneas del metro. Son rápidas, bastante cómodas y donde hay resuelven bastante bien el problema”.
Consultado respecto a los buses eléctricos, Ernesto Gramsch fue claro. “Son buenos en el sentido que demuestran el camino hacia la electricidad de los vehículos, pero para solucionar el problema no”.