A las puertas del Mineduc llegó Francisco Figueroa, pre candidato a diputado del Frente Amplio y Coordinador Nacional de Izquierda Autónoma, a entregar una carta a la ministra Adriana Delpiano para señalar que la propuesta de reforma a la educación superior del Gobierno no se distingue de la propuesta entregada en 2011 por el ministro Joaquín Lavín, el recordado “GANE”. En la ocasión interrogó “¿hay que hablar con la ministra Delpiano o con Harald beyer?”
El ex dirigente señaló que “hoy vemos con preocupación que la propuesta de reforma a la educación superior presentada, no resulta sustantivamente distinta de la realizada con anterioridad por el gobierno de Sebastián Piñera, quien señaló abiertamente que la educación es un bien de consumo”.
Agregó que “no puede ser que la propuesta sea reemplazar un crédito de la banca por uno estatal, porque eso sigue endeudando estudiantes”, en tal sentido, destacó que “vemos que la ministra está comprometida en seguir endeudando estudiantes”. Y, concluyó: “lo que proponemos es condonar la deuda del CAE y ampliar la gratuidad por la vía de la expandir la educación pública”.
¿GANE=Reforma de Bachelet?
La comparación que hace el militante de Izquierda Autónoma y precandidato del Frente Amplio por el distrito 21, se sustenta en que “la creación de una superintendencia de Educación Superior, algunas modificaciones al sistema de acreditación y un sistema de financiamiento mixto basado en el crecimiento de becas” fueron propuestas en el gobierno del magnate Sebastián Piñera, y hoy “sin diferencias demasiado sustantivas, son rescatadas en el proyecto de reforma” que se encuentra en el Congreso. Esto fue demostrado por una investigación realizada por la Fundación Nodo XXI, cuya infografía se puede revisar aquí.
Cabe recordar que el GANE (“Gran Acuerdo Nacional por la Educación) fue la propuesta realizada por Piñera en contexto de las multitudinarias movilizaciones estudiantiles en 2011.
En una columna recientemente publicada por el mismo tema, Figueroa puntualizaba que “el vínculo orgánico de la Concertación y la derecha con el empresariado, han permitido que al momento de presentar, debatir y aprobar reformas”, se mantenga la lógica de “construir un Estado que en vez de garantizar derechos para todas y todos, les garantiza cuantiosos negocios y privilegios”, motivo por el cual criticó “las reformas profundizan al mercado educativo y afianzan al modelo subsidiario en materia de derechos”.
Santiago de Chile, 11 de mayo 2017
Crónica Digital