Ante la amplia discusión pública sobre temas de interés general como las predefiniciones presidenciales, el cambio legal sobre el aborto y la publicación de un manual de educación sexual por parte de la Municipalidad de Santiago que se ha dado en los medios de comunicación, y a la luz de la importancia capital de la prensa en la entrega de información pertinente, plural y transparente, el Colegio de Periodistas de Chile expresa:
- El periodismo cumple un rol fundamental como agente de socialización, teniendo implicancia relevante en la formación de valores, creencias, hábitos, opinión y conductas. Ello, por cierto, conlleva una responsabilidad especial no sólo de parte de quienes lo practican sino también de los propios medios de comunicación.
- En ese sentido, el Código de Ética de nuestra orden profesional, en su artículo 6°, establece que en el ejercicio del periodismo se “deberá establecer siempre, al informar, una distinción clara entre los hechos, las opiniones y las interpretaciones, evitando toda confusión o distorsión deliberada de éstos”. Y como práctica deseable, en su artículo 7° agrega que “el periodista debe transparentar sus fuentes para legitimar ante la sociedad la información entregada. Sólo debe silenciarlas si éstas se lo pidieren, previa confirmación de su idoneidad y confiabilidad, respetando así la confianza otorgada al entregársele antecedentes reservados”.
Contraviniendo lo señalado, en las últimas semanas la ciudadanía ha podido constatar cómo legítimas líneas editoriales de los medios de comunicación, se plantean en los referidos temas (aborto, predefiniciones presidenciales y manual de educación sexualidad), como hechos o “noticias” -incluso en portada- en circunstancias que conllevan, en realidad, la opinión propia de esos medios sobre temas de interés público.
- Esto ocurre cuando, en diversas ocasiones, han dado por ciertas situaciones que correspondían más a especulaciones que a hechos reales, sin fuentes distinguibles, realizando interpretaciones antojadizas y relevando informaciones que, puestas en un contexto periodístico, dan cuenta de una clara intención por lograr que la visión particular del medio incida en la opinión pública.
- Las opiniones y las líneas editoriales constituyen un ámbito legítimo en el sistema mediático, por cierto. Pero, debido a lo fundamental de su rol social, los medios de comunicación tienen la obligación de intentar -por todas las vías- distinguir claramente entre “hechos, opiniones e interpretaciones”, como sostiene nuestra carta ética. Sólo así podrá la ciudadanía, libremente, formarse su propia visión sobre la realidad y ejercer su derecho a la información. Consideramos que eso es hacer periodismo de modo responsable.
Santiago de Chile, 17 de octubre 2016
Crónica Digital