La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, dijo hoy que la erupción del volcán Calbuco pudiera agravarse aunque llamó a la calma y señaló que el país está mejor preparado para contingencias como esta.
Bachelet se trasladará en las próximas horas hasta la sureña región de Los Lagos, donde el volcán Calbuco, situado a unos mil kilómetros de Santiago, entró en erupción y obligó a la evacuación de cuatro mil 500 personas.
Además, alrededor de 70 mil pobladores se alejaron convenientemente de sus casas ante el temor de que el Calbuco emitiera más explosiones y se esparcieran las cenizas de forma virulenta ante la fumarola de más de 15 kilómetros.
La mandataria encabezó esta mañana una reunión con parte de su gabinete en el Palacio de La Moneda. Luego en un contacto con la prensa, dijo que lo sucedido con el Calbuco puede ser más peligroso que lo de Villarrica, otro volcán de Chile.
Advirtió que con las cenizas se pueden generar estropicios en los campos, animales, el forraje, puentes, caminos y, «por cierto, el trabajo, el turismo y, sin duda, la salud».
Las personas evacuadas residen en los pueblos de Ensenada, Alerce, Colonia Río Sur y Correntoso, en la región de Los Lagos, donde se suspendieron las clases y las actividades laborales están restringidas.
El Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) comentó que no se puede descartar que la situación del volcán empeore, ya que la segunda erupción fue más potente.
Bachelet informó que firmó junto a sus ministros dos decretos en los cuales declara Estado de Excepción Constitucional y Zona de Catástrofe para la provincia de Llanquihue y la comuna de Puerto Octay, de la provincia de Osorno.
Indicó que hay dos situaciones en monitoreo con alerta roja en Torres del Paine y Puerto Natales, «porque en Torres del Paine han caído entre 40 y 60 mililitros de lluvia, y en Puerto Natales entre 20 y 40 ml de lluvia en 12 horas».
Santiago de Chile, 23 de abril 2015
Crónica Digital / PL
