Polémico en su discurso contestario y homosexual, el escritor chileno Pedro Lemebel se despidió hoy de este mundo a los 62 años de edad lleno de reconocimientos y el cariño de su pueblo.
Aquejado desde hace tiempo de un cáncer en la laringe, Lemebel obtuvo el Premio Iberoamericano de las Letra José Donoso gracias a obras como Loco Afán (1996), De Perlas y Cicatrices (1998), Tengo miedo Torero (2001) y Háblame de amores (2012).
Dedicó el lauro a su madre, a la fallecida líder comunista chilena Gladys Marín, gran amiga, y a la clase obrera.
En diciembre pasado escribió una carta difundida en Facebook que anticipaba su fin:
“Les dejo estas letras en este último día de este mísero y próspero año…el reloj sigue girando. No hace frío ni calor, y extiendo mi voz como un abrazo anticipado hacia ustedes…los beso a todos, a quienes compartieron conmigo en alguna turbia noche. Nos vemos, donde sea”.
Fue opositor de la dictadura de Augusto Pinochet y siempre defendió sus ideas de izquierda. En la década de 1990 trascendió fronteras, dictó conferencias en Estados Unidos y durante una semana fue homenajeado por la Casa de las Américas en Cuba.
“Nos abrió un camino de libertad, rompió el doble estándar y nos obligó a reconocer un Chilecomplejo y diverso”, destacó su amiga y actual ministra de Cultura, Claudia Barattini.
Lemebel, nacido en Santiago de Chile el 21 de noviembre de 1952, integró el colectivo de arte “La Yeguas del Apocalipsis”, que durante el régimen de Pinochet se manifestó con audaces acciones contra la dictadura.
En días recientes hizo su última aparición pública, en silla de ruedas, al asistir a la “Noche Macuca”, tributo a su obra dentro del Festival de Teatro Santiago a Mil.
Santiago de Chile, 23 de enero 2015
Crónica Digital / PL