Un informe del Registro Civil de Chile da cuenta de 140 fallas en el nuevo sistema de identificación que opera la empresa francesa Morpho.
Según detalles del documento, revelados hoy por el diario La Tercera, de los 140 problemas detectados, entre ellos el hecho de que la plataforma no acepta apellidos con signos, como O´Higgins, por ejemplo, 109 fueron resueltos.
Los 31 que están pendientes de solución tienen plazos definidos para quedar resueltos, con fecha tope el 31 de marzo de 2014.
Las fallas generaron problemas en la atención al público, desde que el sistema se puso en práctica el 30 de septiembre último.
Una de las anomalías es que no estaba habilitada la opción de consultar desde cualquier lugar de Chile en qué estado de tramitación se encontraba el documento de identidad.
Otra de las dificultades consistía en que si faltaba algún dato para elaborar la ficha de identificación, la información quedaba sin tramitar y pendiente, pero ningún funcionario del Registro Civil se percataba del estado del documento hasta que el interesado acudía en busca de su cédula.
Este semana la Contraloría General de la República ordenó una investigación en el Registro Civil de Chile, a causa de fallas en el sistema aplicado por Morpho.
La auditoría al Registro Civil por la entidad fiscalizadora estaba prevista para 2014, sin embargo a partir de las denuncias de fallas en el sistema se decidió adelantarla.
Recientemente, el semanario The Clinic se mofó de la situación existente en el Registro Civil con la implantación del sistema de Morpho, una compañía perteneciente al grupo francés Safrán.
“Huellas dactilares repetidas, superpuestas sobre las de otras personas o duplicadas, confusión en la verificación de identidad a través del sistema fotográfico y hasta una persona que aparecía fumando en la foto de su cédula, son sólo algunos de los graves problemas que han revelado los primeros dos meses de funcionamiento de la nueva plataforma del Registro Civil”, escribió The Clinic.
El semanario señaló que el mecanismo de Morpho que prometía prevenir la falsificación y la adulteración de documentos y facilitar la verificación de identidad del titular, no funciona y comete errores garrafales. “En suma, una real crisis de identidad en el país”, señaló.
A fines de 2011 Morpho se adjudicó la licitación para desarrollar durante 10 años los pasaportes y cédulas de identidad de los chilenos, un proyecto que le generaría ingresos por 400 millones de dólares.
El pasado año la empresa estuvo inmersa en un escándalo en Nigeria, donde enfrentó la justicia por un supuesto pago de sobornos para ganar una licitación.
Santiago de Chile, 22 de noviembre 2013
Crónica Digital / PL