Moscú La cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en Vladivostok se convierte en carta de presentación de Rusia en la referida zona y una oportunidad para ofrecer recursos naturales y recibir una intensa modernización de su industria.
El hecho de ubicarse cerca de la zona del Asia-Pacifico ofrece a Siberia del este y al Lejano Oriente ruso una oportunidad para ocuparse en serio de un tema crucial para la región: la seguridad energética.
Rusia es el mayor productor de hidrocarburos del mundo y dentro de pocos años quedará en la APEC como uno de los pocos exportadores de combustible en la zona, con la posibilidad de llevar a esa región la dimensión europea, a través de su territorio.
Al presentar cartas credenciales en la capital de la oriental comarca de Primorie, Rusia también muestra sus grandes recursos de agua potable y potencial agrícola de su lejano oriente, mientras busca la cooperación de la APEC para adentrarse en las altas tecnologías.
Una modernización debidamente ajustada de la Siberia del este y el Lejano Oriente ruso puede convertirse en motor impulsor de toda la economía de esta nación euroasiática, consideró el académico Andrei Kokoshin.
Asimismo, en ese proceso de intercambio, en el que Rusia podría satisfacer las demandas energéticas crecientes del Asia-Pacífico, será necesario garantizar los intereses de seguridad nacional rusos, la integridad territorial y una soberanía real, apuntó el experto.
En la reunión de Vladivostok, en cuya cumbre empresarial participan unos 700 representantes de las 545 compañías más importantes de la región, Rusia debe aprovechar para entender cuáles son los intereses de los socios y los competidores dentro de la APEC, estimó.
Desde el 1 de enero de 2012, Rusia realizó, como parte de su presidencia anual en la APEC, un centenar de actividades y al menos 11 encuentros a diferentes niveles, incluidos, ministros, empresarios y expertos, en especial, 10 en Rusia y uno en Corea del Sur.
Además, la nación euroasiática llevó a la cumbre de la APEC unas 70 iniciativas que están por aplicarse o en discusión, informó en su momento el viceprimer ministro de este país Igor Shubalov.
Rusia busca impulsar los temas propuestos de su presidencia como el refuerzo de la seguridad alimentaria, el perfeccionamiento de vías seguras de transporte, la liberalización comercial e inversionista, así como la cooperación para el desarrollo de innovaciones.
Por otro lado, Moscú enfrenta la tendencia creciente en la APEC de aumentar la efectividad energética y el empleo de energías renovables que quieren llevar dentro de algunos años a un 40 por ciento del total de combustible consumido.
La región del Asia-Pacífico, con más de dos mil 500 millones de habitantes y que concentra el 44 por ciento del comercio mundial, el 53 del Producto Interno Bruto planetario y el 44,6 de las inversiones, necesita crear vías de transporte seguro de mercancías y energéticos.
Del total del comercio entre la Unión Europea y Asia, sólo el uno por ciento corresponde a las mercancías que transitan a través de Rusia. Con solo el crecimiento del uno por ciento en ese sentido este país obtendría ingresos por unos mil millones de dólares adicionales.
Asimismo, por primera vez desde su ingreso a la APEC en 1998, Rusia participa como miembro pleno de la Organización Mundial del Comercio, algo propio de un país que preside un foro, en el cual figura entre sus principales prioridades la liberalización de los mercados.
La asociación transpacífica nos conviene, considera Shubalov, quien, sin embargo, afirma que la parte rusa deberá estudiar aún las variantes de una zona de libre comercio en la región, pues necesita el máximo de transparencia al sumarse a tales tratados.
Precisamente, uno de los logros de la presidencia rusa fue un consenso para aplicar medidas que garanticen la necesaria transparencia de los acuerdos de libre comercio en la región.
Durante la presidencia rusa se efectuaron reuniones al nivel de ministros de Comercio, Transporte, Agricultura y Energía, entre otros.
En esta ocasión, se esperan 18 máximos dirigentes de economías, mientras otros están representados por enviados de los líderes.
La APEC surgió en 1989 y desde 1993 se reúne al nivel de líderes de economías, pero en sus sesiones se evita la mención específica de algún signo que denote pertenencia a estado o cargos políticos, solo las economías, como tampoco es acostumbre analizar a la Unión Europea.
En la referida organización, hay dos miembros del BRICS (Rusia y China), casi la mitad del bloque de conocidas perspectivas económicas.
A Rusia, por otro lado, le es necesario explicar a las economías de la APEC el significado y beneficios de la Unión Aduanera, firmada con Kazajstán y Belarús y vigente desde enero pasado.
Desde el punto de vista interno, la cumbre en Vladivostok, y en específico en la isla Rusky, antigua base naval convertida en centro docente y científico que funcionará como tal pasada la cumbre, el legado en materia de infraestructura es apreciable.
La preparación de la semana de la cumbre de la APEC necesitó una inversión de 660 mil millones de rublos (unos 16 mil 747 millones de dólares al cambio actual) en los últimos cinco años, de los cuales solo un tercio correspondió a recursos del presupuesto estatal.
Además del campus de la Universidad Federal del Lejano Oriente, la comarca de Primorie recibe nuevas instalaciones de acueducto, un puente en la bahía del Cuerno de Oro, que une a la isla Rusky con Vladivostok, una nueva terminal aérea y un puerto modernizado.
En la ola de realización de los pasos para la cumbre de la APEC, Japón abrió su primera fábrica Mitsubishi de ciclo completo en Primorie para la producción de autos fuera de Japón.
Tal paso constituye uno de los puntos defendidos por Rusia en sus relaciones con la APEC, además de que desea participar más activamente en la discusión de la política energética regional, incluidas las intenciones de incrementar al empleo de la energía nuclear.
Pese a lo ocurrido en Fukushima, las naciones del área estiman que la energía atómica con fines pacíficos y el empleo del gas natural en las termoeléctricas tienen pocas alternativas desde el punto de vista ecológico, un asunto crucial para los países del Asia-Pacífico.
Santiago de Chile, sábado 8 de septiembre 2012
Por Antonio Rondón Prensa Latina
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