Los atacantes también detonaron chalecos explosivos y usaron granadas propulsadas por cohetes.
Según la fuente, este es la acción más mortífera perpetrada contra una base del Ejército hasta la fecha.
El movimiento Talibán reivindicó la autoría a través de un comunicado e indicó que fue en represalia por la reciente muerte de varios líderes del grupo insurgente en el norte del país.
Expertos califican de indetenibles las acciones terroristas en tierras afganas, donde tropas estadounidenses garantizaron oficialmente por más de 15 años su presencia en la región asiática, con alegados fines de lucha contra el terrorismo que no mostraron resultados durante la intervención militar.
Kabul, 22 abril 2017
Crónica Digital /PL