Recato, solemnidad y brotes de violencia matizaron el 41 aniversario del sangriento golpe de Estado en Chile, en otra demostración de que la reconciliación de la sociedad todavía es una quimera.
Poco después de las 18:00 hora local, la capital chilena se mantuvo recogida y silenciosa, salvo excepcionales momentos de recordación de los torturados, desparecidos y asesinados durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Al pie del monumento de Salvador Allende, a pocos metros del Palacio de La Moneda, decenas de personas se agruparon algunos instantes para patentizar su homenaje al extinto presidente constitucional derrocado el 11 de septiembre de 1973.
De forma paralela en el Galpón Víctor Jara, otros defensores de los derechos humanos desplegaban fotos de familiares y amigos desaparecidos durante el régimen militar de Pinochet en la zona de la Plaza Brasil.
El tributo se focalizó en Víctor Jara, el cantautor brutalmente asesinado en el Estadio Nacional el 15 de septiembre de 1973, aunque también dio visibilidad a parte de los mil 200 desaparecidos de los cuales todavía no se sabe nada.
Lo mismo ocurrió en Londres 38, espacio de la memoria, un antiguo inmueble del Partido Socialista convertido en centro clandestino de detención y tortura en los años de la dictadura, para completar una jornada de muchas emociones.
El discurso de la presidenta de la República, Michelle Bachelet, en La Moneda, y luego, su demanda al Congreso de derogar la Ley de Amnistía impuesta en 1978, llenaron de simbolismo la fecha.
Sin embargo, no cesaron los brotes de violencia y el país, ya temeroso a partir del atentado terrorista del lunes en un restaurante de comida rápida, con saldo de 14 heridos, se vio sacudido por otras notas sombrías.
Bombas de ruido detonadas en el balneario de Viña del Mar, intentos de robos de cajeros automáticos con explosivos y la quema de un autobús en Santiago de Chile, fueron algunos de los hechos que sacudieron a la nación transandina.
La Policía de Investigaciones (PDI) dio cuenta de la detención de más de mil 300 personas, en su mayoría por delitos de hurto, lesiones, robo con fuerza e infracción a la Ley de Drogas, además de vandalismo.
Por Fausto Triana, corresponsal de Prensa Latina
Santiago de Chile, 12 de septiembre 2014
Crónica Digital / PL