La contienda presidencial en Chile entró en su recta final, luego de la emisión de las franjas televisivas de la candidata del bloque de centro-izquierda, Michelle Bachelet, y la abanderada de la Alianza de derecha, Evelyn Matthei.
A las 20:50 hora local (23:50 GMT) del domingo, los canales de televisión comenzaron a transmitir la propaganda electoral de ambos bloques, segmentos que en la práctica dieron inicio a la contienda de cara a la segunda vuelta, que culminará en las urnas el venidero 15 de diciembre, aunque las cortinas de la campaña electoral deben cerrarse el venidero día 12.
Durante cinco minutos, cada candidata dio las primeras pinceladas de su oferta gubernamental, intentando brindar una imagen renovada, luego de la campaña desatada previa a la primera vuelta del pasado 17 de noviembre.
Bachelet mostró continuidad en sus ejes de campaña, pero esta vez apoyada en los rostros y llamados de emblemáticos exlíderes de movimientos sociales, como la exvocera de la Confederación de Estudiantes de Chile, Camila Vallejo, la líder de la juventud comunista, Karol Cariola, y el pescador Iván Fuentes, la principal voz de las protestas en la Región de Aysén.
La franja televisiva de la expresidenta (2006-2010) puso énfasis en sus periplos por varias ciudades del país, centrada en las acciones que emprenderá contra la delincuencia y sus propuestas para fortalecer el sistema de salud pública.
Por su parte, la abanderada de la derecha, Matthei, recurrió a los nuevos rostros de su comando, tras la salida de su lugarteniente, el exministro de Desarrollo Social Joaquín Lavín, quien se echó a un lado tras el discreto 25,02 por ciento logrado por la candidata en la primera vuelta del 17 de noviembre.
En esa ronda de las elecciones, Bachelet logró un 46,67 por ciento, solo a poco más de tres puntos para ganar en la competición, donde necesitaba más del 50 por ciento de los sufragios.
Ahora, Matthei comenzó su franja con los preparativos de un desayuno para su renovado equipo de campaña, repleto de rostros jóvenes, y volcada en posturas de defensa contra las mujeres que son víctimas de la violencia intrafamiliar.
Con el slogan de “si se puede”, la exministra de Trabajo se propone remontar la ventaja mostrada por Bechelet en la primera vuelta, que según todos los estimados, la llevará a proclamarse ganadora el venidero 15 de diciembre, pese al fantasma del abstencionismo que ronda los comicios.
De los 13 millones 500 mil ciudadanos inscritos en el padrón electoral, en la primera vuelta solo ejercieron el sufragio 6,6 millones, equivalente al 49 por ciento de los electores, la concurrencia a las urnas más baja registrada en el país desde 1989.
En esa ronda, además de Bechelet y Matthei, compitieron siete candidatos, pero al ser ellas las mejores votadas, y no alcanzar Bachelet más del 50 por ciento de las boletas, fue necesario convocar al balotaje del 15 de diciembre.
Poco después de la primera vuelta, el presidente del consejo directivo del Servicio Electoral, Patricio Santamaría, recordó que históricamente en las segundas vueltas hay una disminución de la participación.
Es por ello que a las puertas del 15 de diciembre, los comandos de Bachelet y Matthei reforzaron sus llamados a votar, e introdujeron nuevas dinámicas para llamar la atención del electorado.
La expresidenta (2006-2010) en los últimos días se reunión con jóvenes evangélicos, hizo recorridos por las ciudades de Concepción y Talcahuano, en la región del Biobío, y recibió el apoyo de 24 premios nacionales en varias disciplinas.
En esa cita recibió el respaldo de los premios nacionales María Olivia Monckeberg y Faride Zerán, ambos en Periodismo; Sonia Montecino (Humanidades), Carlos Conca (Ciencias Exactas), Margot Loyola (Artes Musicales), Juan Asenjo (Ciencias aplicadas), Servet Martínez (Ciencias exactas) y Humberto Giannini (Humanidades), entre otros.
Además de insistir en el voto, Bachelet destacó uno de los pilares de su programa, el de avanzar hacia la gratuidad universal de la educación, que es a la vez es una de las grandes diferencias con la plataforma de Matthei, opuesta a que ese beneficio llegue a todos los sectores de la sociedad.
En el otro polo, el comando de Matthei anunció un nuevo programa de gobierno con la vista puesta en la segunda vuelta, retoque que recibió duras críticas de las filas del excandidato independiente Franco Parisi, cuyo vocero calificó el paquete de la aspirante de la derecha como “una oferta navideña”.
El nuevo plan consta de 30 medidas, que según palabras de uno de los integrantes del comando de Matthei, se trata de un complemento, con el cual buscan darle cuerpo al “sueño de un Chile más justo”.
Las modificaciones tienden a darle mayores beneficios a la llamada clase media, y se apoya en propuestas que realizaron excandidatos presidenciales de la primera vuelta, entre ellos el independiente Franco Parisi, quien llegó a calificar a Matthei como una persona “muy, muy, pero muy mala”.
Según los resultados de una encuesta difundidos la semana pasada, Bachelet deberá ganar en la segunda vuelta de las elecciones la mayor parte de los votos recibidos en primera ronda por Parisi (10,11 por ciento) y el líder del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami, ganador del 10,98 por ciento de los votos.
Por Enrique Torres
Santiago de Chile, 2 de diciembre 2013
Crónica Digital / PL