Por equipo Crónica Digital
Luego de conocido el fracaso de la compra de la casa del ex Presidente Allende a su sucesión por el Estado, todos hemos sido testigos de cómo se ha motejado al gobierno y sus asesores de inexpertos, inútiles, etc.-
Todo ello a raíz de la existencia del inciso segundo del artículo 60 de la Constitución vigente en Chile que señala:
“Cesará en el cargo el diputado o senador que durante su ejercicio celebrare o caucionare contratos con el Estado, o el que actuare como procurador o agente en gestiones particulares de carácter administrativo, en la provisión de empleos públicos, consejerías, funciones o comisiones de similar naturaleza. En la misma sanción incurrirá el que acepte ser director de banco o de alguna sociedad anónima, o ejercer cargos de similar importancia en estas actividades”.-
Con el paso de los días nos hemos transformado en expertos constitucionalistas y otros bailan al ritmo de republicanos, pinochetistas y demases, entonces es relevante determinar el alcance de la norma infringida por el Estado, por una Senadora en ejercicio y por una Ministra de Estado, poniendo énfasis en lo absoluto de la norma (dictada en tiempos de otros y mayores absolutismos), todos con un denominador común, cual es la histeria ante lo ocurrido y lanzar piedras, dardos, vasos y todo lo que tengamos a manos (otros lanzan acusaciones constitucionales y requerimientos al Tribunal Constitucional).-
Pero como buen futbolista, poniendo la pelota al piso, no sé si todos o casi todos, o algunos de nuestros Senadores y/o Diputados en ejercicio han infringido la norma, para aplicar una sanción que no registra plazo de prescripción ni caducidad, pero podríamos ejemplificar algunas de éstas infracciones, omisiones, o como quiera que se les llame, así:
- Cesa en el cargo el diputado o Senador que tome el metro, ya que ha celebrado un contrato de transporte con el Estado;
- Cesa en el cargo el diputado o Senador que, para su reelección, contrata un crédito con el Banco del Estado para su campaña;
- Cesa en el cargo el diputado o Senador que toma el Ferrocarril del Estado a Chillán u otro punto del país;
- Cesa en el cargo el diputado o Senador que teniendo domicilio en la comuna de Maipú, celebra un contrato con Smapa para los servicios sanitarios;
- Cesa en el cargo el diputado o Senador que adquiere abonos para la ópera del Teatro Municipal de Santiago;
- Cesa en el cargo el diputado o Senador que en un proceso penal llega a un acuerdo reparatorio o a una Suspensión condicional;
Podríamos citar innumerables otros ejemplos, pero claro, no creo que ningún diputado o Senador en ejercicio haya incurrido en las prácticas inconstitucionales descritas, o en otras, ya que sin duda se habría auto denunciado y dejado voluntariamente su cargo, como corresponde a quien jura respetar la Constitución y las leyes.-
La moraleja es clara, las fábulas ya no son necesarias en nuestro país.
Santiago de Chile, 16 de enero 2025
Crónica Digital
