“Es sobre todo un libro para ser militado. No apto para indiferentes, es una invitación a leerlo, socializarlo y recrearlo al calor del umbral histórico que se abrió en Chile a partir del 18 de octubre de 2019 y –con la intención declarada de tomar partido– darle continuidad al proceso de radicalización política contra el modelo de explotación dominante”, señala Marco Álvarez en la introducción del libro “La Revuelta Chilena. Estrategia, izquierdas y movimientos sociales”.
De reciente aparición, iniciativa del Grupo de Pensamiento Crítico y Memoria Histórica, ha sido publicado por Pehuén Editores, y es una contribución valiosa para una reflexión para las perspectivas de transformación social en Chile, con un posicionamiento explícito en el campo de las izquierdas, sin la candidez de suponer que aquello es posible de acometerse al margen de definiciones.
El libro tiene dos partes. La primera se titula “Anticapitalismo y Movimientos Sociales”, e incluye los siguientes capítulos, cada uno de ellos a cargo de un diferente autor:
–Dignidad: Eje estratégico para un nuevo proyecto histórico emancipatorio.
–Feminismos populares para una apuesta programática de emancipación colectiva.
–Santiago en tensión: una cartografía de la rabia.
–Juventud: la chispa de la revuelta.
–El derecho a la revuelta es de todos, incluso de los “discapacitados”.
–Para un horizonte leninista y libertario.
–Transformación democrática de los territorios.
–Crisis orgánica, hegemonía y eclipse de la razón estratégica.
–Revuelta e intelectuales: apuntes para un análisis.
–Agotamiento del Estado colonial chileno, pueblo mapuche y los desafíos a partir del 18– O.
–Política y Medio Ambiente: las izquierdas en la encrucijada civilizatoria.
La segunda parte se titula, simplemente, “izquierdas” y contiene capítulos a cargo de autores y autoras procedentes de Fuerza Común, Izquierda Libertaria, Comunes, Convergencia Social, el Partido de Trabajadores Revolucionarios, el Movimiento Victoria Popular, y el Partido Progresista de Chile. Son los siguientes:
–Feminismos constituyentes: articulando mayorías para un nuevo Chile.
–La vía chilena al populismo.
–Los días decisivos de la rebelión de octubre.
–La ruptura democrática y el momento constituyente.
–Sobre el ciclo político abierto por la revuelta social de octubre.
–Humildad para la unidad, unidad para la victoria y la victoria para transformar Chile.
En su trabajo sobre “feminismos constituyentes”, Camila Musante, abogada y militante de Fuerza Común, sostiene: “Política es lo que han hecho los pueblos de Chile desde las calles, como vimos el 18–O. Y forzaron al mundo político y parlamentario a reaccionar frente a esta realidad. No hay que olvidar lo que consiguió el movimiento social y en este sentido nuestra labor es continuar apoyando a la movilización para que continúen realizándose las transformaciones que Chile necesita. Las fuerzas progresistas debemos respaldar el actuar de la movilización popular. Pues a partir de ahí, comenzaron a surgir las transformaciones políticas que se pensaban increíbles”.
Camila Aguayo, Licenciada en Psicología, integrante de la Asamblea Feminista Plurinacional y del Secretariado Político de Izquierda Libertaria, en su reflexión respecto de “la ruptura democrática y el momento constituyente”, sostiene: “Dado el quórum de dos tercios y el mecanismo de elección de los y las delegadas constituyentes, la cristalización de una nueva forma de organizar el Estado resulta compleja. Frente a ello, el momento constituyente debe pensarse como la apertura de un nuevo proceso político de largo aliento, en que el desarrollo programático no se limite al itinerario constitucional, sino que logre construir un programa con carácter de ruptura frente al neoliberalismo”.
Andrea Condemarin, vicepresidenta del Partido Progresista de Chile y fundadora del Frente de Mujeres Tati Allende, enfatiza: “La estrategia debe estar centrada en la más amplia unidad del centro, la centro–izquierda y la izquierda para abrir paso a los cambios. La tesis de la unidad social y política del pueblo que hace medio siglo enarbolaron Salvador Allende y Radomiro Tomic está más vigente que nunca. No hablamos de cualquier unidad, sino de una convergencia basada en el compromiso serio y de detalle en establecer desde la Nueva Constitución un Estado democrático de bienestar, una sociedad con derechos sociales garantizados”. Y asevera: “Sabemos que la soberbia no es el camino”.
Santiago, 10 de abril 2021.
Crónica Digital.