Las organizaciones que conformamos la Convergencia Nacional de Gremios Pymes y Cooperativas de Chile (Convergencia Pymes), ante la inminente presentación por parte del Ejecutivo del FOGAPE 2.0, deseamos expresar nuestra profunda preocupación por los trascendidos oficiales y extraoficiales, de los que una vez más, nos hemos enterado por la prensa y no por conductos formales o por la Mesa de Trabajo MIPYMES de la LEY 21.256.
Nos cuesta entender la necesidad de un FOGAPE 2.0, con uno aún vigente, que prometió beneficiar a un millón de empresas, y que ha llegado a menos del 30%, ¿no será mejor agotar el actual, bajando barreras de entrada, principalmente asociadas a políticas de riesgo poco transparentes, discriminatorias y alejadas de la realidad?
Como Convergencia Pymes, en primer lugar, nos preocupa la “flexibilización” indicada por Hacienda, que se traduce en aumento de tasas y, eventualmente, eliminación de la obligación de otorgar periodos de gracia, y la prohibición de iniciar juicios ejecutivos o concursales por 6 meses, desde el otorgamiento del crédito.
Lo anterior, no hace más que velar por los intereses de los bancos, no representado ningún beneficio para las Mipymes. Por esto, consideramos que ni el sector financiero podría haber redactado mejor un proyecto que resguarde sus intereses y su rentabilidad.
En segunda instancia, nos parece del todo adecuado que la tasa, que a nuestro juicio debe mantenerse en los niveles actuales o corregirse a la baja, sea fijada por Ley y no sólo por reglamento, al arbitrio de autoridades que han mostrado nula sensibilidad hacia las empresas de menor tamaño.
En tercer lugar, si bien no tenemos certeza, vemos con preocupación la posible ampliación de FOGAPE 2.0 a grandes empresas sobre el millón de UF. Ya es impresentable que el FOGAPE COVID- 19 haya financiado, en condiciones muy favorables, al 65% de las grandes empresas. Esperamos que las garantías estatales se centren en las empresas de menor tamaño, y si es deseo del Ejecutivo apoyar las grandes empresas, lo haga mediante un instrumento diferente.
Por último, reiteramos que FOGAPE 2.0 se ha fraguado dando la espalda a las Mipymes y sus organizaciones, resguardando los intereses de la banca, resultando ser uno de los pocos, o quizás el único sector, que ha logrado ganancias cuando el resto de los actores de la economía sufren y se desmantelan. ¡Basta de abusos y de favorecer a los poderosos!
Santiago de Chile, 15 de diciembre 2020
Crónica Digital