El Frente Amplio de Uruguay parte hoy a la conquista de un cuarto gobierno, con afinadas Bases Programáticas analizadas aquí hace unas horas en Plenario Nacional.
Única fuerza política que elabora un programa con adherentes de todo el país, con más de un año de trabajo, el Frente Amplio reabrió el debate donde lo dejó la cita extraordinaria de diciembre pasado.
Entonces, ya con la mirada puesta en la contienda electoral hasta octubre de 2019, se consideraron 36 mociones sobre vivienda, educación y bienestar animal, entre otros asuntos de sentir popular.
De los únicos temas que quedaron pendientes, fue el de la redimensión de las Fuerzas Armadas la que ganó más foco en la reciente circunstancia de la destitución por el Presidente de la República Tabaré Vázquez del jefe del Ejército, Guido Manini Rios, tras atacar al Poder Judicial.
Sin discrepancias de fondo, aunque con diferencias sobre la cantidad y forma, se acordó acompañar el proceso “de acuerdo a necesidades operativas”, así como “se ajustará el número de oficiales tras un análisis”.
En estos momentos se encuentra en agenda parlamentaria una reforma del decreto de Ley Orgánica Militar de 1974, uno de los proyectos frenteamplistas priorizados en un año de recorte legislativo a causa de las elecciones.
Ante el interés mostrado por la prensa local, el presidente del FA, Javier Miranda, aclaró que la reducción en la institución castrense planteada nada tiene que ver con la decisión del mandatario uruguayo de cesar a Manini en el caso en el marco de sus atribuciones ejecutivas.
Entre los temas candentes sobresalió el de la vivienda, sobre el que recogiendo preocupaciones de deudores por préstamos hipotecarios y tasa de interés, se concluyó que “una política es central para fomentar el desarrollo y facilitar al máximo la autoconstrucción”.
Con respecto a Educación, el Frente Amplio se pronunció por reimpulsar la creación de la Universidad de la Educación como necesaria e imprescindible para que todos los docentes tengan más alto nivel de preparación.
El plenario catalogó como un “aporte sustancial” que “lo estamos considerando”, las 16 medidas que propone el frenteamplista Movimiento de Participación Popular (MPP) para reafirmar la ética en política.
Presentadas por su militante más destacado, el ex Presidente José Mujica, aboga por un régimen de donaciones especiales para las empresas contribuyentes del impuesto a la Renta de las Actividades Económicas, cuya utilización centralizará el Parlamento Nacional.
Adelanta que esos fondos se deben utilizar para el fortalecimiento de un sistema de becas educativas, destinado a estudiantes de bajos recursos y del interior del país, y también plantea distribuir fincas e inmuebles vacíos de la Administración central.
Otras medidas consisten en eliminar la partida de prensa que cobran los legisladores, reducir los Directorios de los entes autónomos y una Ley General de salarios del Estado, cuyo único tope sea el del presidente de la República.
El Frente Amplio de Uruguay es una coalición de izquierda fundada el 5 de febrero de 1971, que se encuentra integrado por la totalidad de las fuerzas de izquierdas y progresistas, sin exclusiones de ninguna naturaleza, que incluyen desde el Movimiento de Participación Popular (donde se encuentra expresada la experiencia tupamara), pasando por comunistas y socialistas, hasta la Democracia Cristiana.
El Presidente de la República desde 2015, Tabaré Vázquez, pertenece al Frente Amplio, que además posee mayoría parlamentaria en ambas Cámaras. Desde 1990, gobierna además en el Departamento de Montevideo.
Montevideo, 17 de marzo 2019
Crónica Digital / Prensa Latina.