El senador independiente y candidato de centroizquierda a la presidencia de Chile, Alejandro Guillier, admitió que se trata de “una dura derrota” y felicitó al ganador, Sebastián Piñera.
Casi dos horas después del cierre de las mesas de votaciones y con una tendencia irreversible, Guillier, acompañado de su esposa, reconoció que “es una noche triste, pero de los reveses se aprende y volveremos a levantarnos”.
“Estamos de todas formas orgullosos por la democracia y seriedad de Chile en una jornada electoral impecable. Llamé a Piñera para felicitarlo por su macizo éxito”, dijo el legislador en un céntrico hotel de esta capital.
Desde los primeros cómputos, el nerviosismo se apoderó de las figuras principales del equipo de campaña de Guillier, con una ligera tendencia favorable a su contrincante que se fue haciendo mayor en la medida en que avanzaban los conteos.
“Nos sentimos orgullosos de haber dado todo por una causa que no termina esta noche. Como senador de la República seguiré defendiendo las reformas de alcance social.
Tendremos que reflexionar para recuperar el empuje de la centroizquierda”, apuntó.
Guillier, un experiodista de 64 años, valoró el papel de todas las personas que lo respaldaron, aunque al mismo tiempo señaló con amargura que es necesario aprender las lecciones que deja este resultado.
Apreció el espaldarazo recibido por los chilenos en el extranjero y recalcó que la historia es larga y el país sudamericano tiene mucho por avanzar hacia un futuro mejor.
Poco después, la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, felicitó en una video llamada a
Sebastián Piñera y ambos se comprometieron a conversar mañana en un desayuno de trabajo en casa del mandatario electo.
El Servicio Electoral (Servel) declaró oficialmente que Sebastián Piñera es el presidente de Chile, tras el cómputo del 99,77 por ciento de los votos, una diferencia que volvió a burlarse de los pronósticos.
Santiago de Chile, 18 de diciembre 2017
Crónica Digital /PL