Precisa la declaración que se trata de 101 días de cese temporal y nacional que deben finalizar el 9 de enero de 2018 y no el 12 de enero, como han expresado algunos voceros gubernamentales.
Añade la nota que desde que se tomó la decisión en la capital ecuatoriana, las dos delegaciones han estado dedicadas a redactar los reglamentos de funcionamiento del Mecanismo de Veeduría y Verificación.
Asimismo los Protocolos sobre Reglas y Compromisos, Comunicaciones para prevenir incidentes, Seguridad e Información pública.
El objetivo, recalca la guerrilla colombiana, es que el inicio del cese el fuego pueda darse ‘contando con reglas claras’.
Se trata, explica, de rebajar la intensidad del conflicto con el fin de que la población sea la principal beneficiada de un clima de paz.
El comunicado del ELN señala que ‘en este inicio, no hay separación de fuerzas y cada parte mantiene su plena movilidad; contando con la veeduría y verificación de la ONU, la Conferencia Episcopal de Colombia y las organizaciones sociales’.
Como expresión de la voluntad de paz, subraya que los propósitos de la mesa de diálogo son ‘suscribir un Acuerdo Final para terminar el conflicto armado y acordar transformaciones en la búsqueda de una Colombia en paz y equidad’.
El ELN sostiene también que con la tregua se busca que despegue la participación masiva de la sociedad, como sujeto protagónico de los cambios.
Destaca finalmente que uno de los fines de la agenda de conversaciones es erradicar la persecución política y ayudar a frenar la expansión del paramilitarismo, incluidos sus intentos por copar territorios que estaban en manos de las FARC.
Bogotá, 24 septiembre 2017
Crónica Digital /PL