Si vemos que esos jugadores no pueden entrar porque tienen algún tipo de procedimiento en curso, simplemente tendremos que pensar si nuestros partidos europeos deben jugarse allí, indicó.
En una entrevista concedida al diario estadounidense The New York Times, Ceferin insistió en el problema que puede suponer la salida del Reino Unido de la Unión Europea si los británicos pueden viajar a cualquier sitio, pero los futbolistas de otros países no pueden viajar a ese país.
Este año la final de la Liga de Campeones es en Cardiff. Imagine si no les permiten entrar. Es un gran tema para nosotros, afirmó.
Ceferin consideró que la libre circulación en Europa es mucho mejor, y prometió dialogar con el gobierno británico.
En 2020, si el Brexit se ha consumado, puede ser un gran problema para los aficionados que quieran acudir a la final de la Eurocopa que se jugará en Londres, añadió.
Ceferin recordó lo ocurrido el pasado noviembre al internacional marfileño del París Saint-Germain (PSG) Serge Aurier, a quien las autoridades británicas le impidieron entrar por un problema judicial en Francia.
El directivo también se refirió a las dificultades que la posible candidatura de Estados Unidos al Mundial de 2026 puede tener si el presidente Donald Trump aplica las medidas restrictivas para la entrada de extranjeros que pretende.
Si los jugadores no pueden viajar por decisiones políticas o populistas la Copa del Mundo no se puede jugar allí. Esto es válido para Estados Unidos y para cualquier otro país que quiera acoger el Mundial, aseguró.
Washington, 28 febrero 2017
Crónica Digital /PL