El ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Heraldo Muñoz, presentó la 39 Reunión Consultiva del Tratado Antártico, que se desarrollará en esta capital del 23 de mayo al 1 de junio próximos.
El evento contará con la participación de 400 delegados de 53 países, 29 de ellos con capacidad de consultores dentro del cuerpo legislativo que marca las reglas en el llamado continente blanco.
Ante científicos, diplomáticos y miembros de los ministerios de Defensa y Medio Ambiente, Muñoz destacó que el Tratado cumple ya 55 años de su entrada en vigor y se convirtió en un ejemplo de cooperación dentro de una zona de paz.
El canciller chileno recordó que el pasado año el país austral acogió la Conferencia Internacional Nuestro Océano que entre otras cosas, sirvió para el anuncio de Chile de establecer un área marítima protegida de 300 mil kilómetros cuadrados.
Esperamos ampliar la zona hasta un millón de kilómetros cuadrados con la Antártida incluida, para contar con el área marítima protegida más grande de las Américas y coadyuvar a la preservación del medio ambiente, explicó Muñoz.
A modo de anécdota gráfica, el jefe de la diplomacia chilena apuntó que hace poco le hablaron del récord histórico de temperatura en la Antártida (17,3 grado Celsio) y de intensas lluvia en el desierto de Atacama.
Son muestras de cuánto necesitamos hacer para la protección de nuestro planeta, acotó.
En el lanzamiento de la cita, también usaron de la palabra el responsable de la Secretaría del Tratado, Manfred Reinke, y de la Embajadora de Noruega en Chile, Hege Araldsen.
Reinke y Araldsen encomiaron la estabilidad y colaboración que existe en la Antártida, considera zona de paz y de estudio científico, a la vez que confiaron en el éxito de las deliberaciones a desarrollarse en esta urbe.
Materias la ciencia, turismo y preservación del medio ambiente estarán en el centro de los debates.
El Tratado Antártico tiene complementos en otros acuerdos, a la sazón las Convenciones para la conservación de las focas y de recursos marinos vivos antártico; además del protocolo al Tratadp sobre protección del medio ambiente.
Chile es el país más cercano a la Antártida y su región de Magallanes ha devenido puerta de entrada al continente blanco.
Santiago de Chile, 30 de abril 2016
Crónica Digital / PL