En este sábado de primavera, las Agrupaciones de Familiares de Detenidos Desaparecidos y Ejecutados Políticos (AFDDyEP) de Talca, Parral, Chillán, Linares y San Javier se hicieron presentes una vez más ante las puertas de Colonia Dignidad para protestar contra el turismo que han implementado los alemanes de este enclave sobre lo que fue un centro de secuestro, tortura y exterminio a opositores de la dictadura de Augusto Pinochet.
En esta ocasión, los familiares, amigos y ex prisioneros políticos que participaron en la protesta lanzaron consignas en recuerdo de los detenidos desaparecidos que fueron asesinados en este lugar hoy denominado Complejo Turístico Villa Baviera, y entonaron canciones como “Todavía cantamos”, “Yo te nombro libertad” y “La cigarra”, para después terminar con una emotiva visita al memorial que se encuentra a orillas del río Perquilauquén.
A continuación, el discurso íntegro de Myrna Troncoso, presidenta de la AFDDyEP de Talca, pronunciado en nombre de las agrupaciones presentes:
Sé que para muchos nuestra porfiada insistencia en venir a denunciar este enclave alemán llamado Colonia Dignidad puede resultar inconducente. Para muchos es una pérdida de tiempo, dada la indiferencia de los actuales jerarcas y colonos para entregar información sobre la suerte y los restos de nuestros familiares y amigos. Sin embargo, lo seguiremos haciendo en contra de toda esperanza, aunque el Estado deChile se haga el sordo y durante más de dos décadas no escuche el clamor por justicia y verdad que anima a los chilenos.
¡Que más quisieran los cómplices y encubridores de este enclave de la muerte, que los dejáramos tranquilos! ¡Qué más desearían los nuevos jerarcas que seguir ganando dinero sin recordar su
oscuro pasado!
El blanqueo de esta oscura Colonia construida sobre el abuso, la mentira, los crímenes y la esclavitud de sus propios integrantes es parte de su “plan de negocios “para seguir ganando dinero a costa de la ingenuidad, y por qué no decirlo, la complicidad de muchos chilenos.
Pero aquí estamos nuevamente para denunciar los crímenes sin nombre cometidos en este lugar. Muchos de esos crímenes están avalados por las sentencias de los tribunales de justicia, que dicen que este fue un campo de tortura y exterminio de la dictadura cívico-militar. Por esta puerta entraron muchos chilenos que nunca regresaron y que perdieron la vida en manos de los esbirros de la dictadura. Hace poco pudimos conocer una de las fosas donde estuvieron algunos de nuestros familiares. Después sus restos fueron exhumados, quemados y arrojados al río Perquilauquén según confesión del propio guardaespaldas del líder de este enclave, Paul Schäfer.
No faltará el que diga que debemos dar vuelta la página y olvidar, como si alguien pudiera olvidar a su padre, su hermano o su amigo. Nosotros nos negamos a la amnesia de este país. Nunca olvidaremos y nunca dejaremos de clamar verdad, justicia y memoria para nuestros luchadores sociales asesinados al margen de toda ley.
Sabemos que la conciencia de muchos nos acompaña. Que el mundo observa con asombro cómo puede funcionar un complejo turístico en un lugar de tortura y muerte. La conciencia mundial siente vergüenza de este lugar y un día, no muy lejano, será rescatado para convertirse en un Memorial en homenaje a los sobrevivientes y a nuestros amados Detenidos Desaparecidos.
Por eso, con la misma convicción de siempre, volvemos a exigir verdad, justicia y memoria siempre.
Colonia Dignidad, 17 de Octubre de 2015
Crónica Digital / AFDD