Candidatos presidenciales brasileños incrementan esta semana sus recorridos y movilizaciones en busca de votos, cuando restan hoy 19 días para las elecciones generales en este país suramericano.
La presidenta de la nación, Dilma Rousseff, quien busca su reelección por el Partido de los Trabajadores (PT), defendió la inversión de recursos obtenidos de la explotación de petróleo en la educación.
La ampliación de los círculos infantiles, una mejor paga para los profesores y garantizar la calidad y el acceso de todos los niños y jóvenes a las escuelas fueron destacados por Rousseff en declaraciones a medios de prensa nacionales.
Entre otras prioridades mencionó el otorgamiento en 2015 de 100 mil becas para jóvenes que deseen estudiar en el extranjero en la denominada segunda etapa del programa “Ciencia sin Frontera”, si es reelecta en el cargo.
La mandataria reitero asimismo su crítica a su adversaria Marina Silva, del Partido Socialista Brasileño (PSB), en la disputa del sillón presidencial por cambiar de opinión cada vez que se siente presionada.
Puntualizó que quien carece de una posición definida no puede ser dignataria y alertó sobre la necesidad de no llevar el debate político al campo personal.
Rousseff se quejo de la postulante del PSB por difamar al PT, organización en la cual militó durante 12 años y ahora trata de calumniarla.
En una entrevista difundida la semana pasada, Silva dijo que el gobeernante PT “no es confiable, porque colocó por 12 años a un director para asaltar los cofres de Petrobras”.
La candidata opositora se refería al exdirector de la petrolera estatal Paulo Roberto Costa, preso por lavado de dinero, quien -según la revista Veja- reveló la implicación de políticos en un presunto esquema de soborno en la compañía.
En una declaración realizada ayer en Brasilia, la pretendiente del PSB prometió a comunidades de indígenas, negros y pescadores atender a sus demandas en contra de la construcción de hidroeléctricas.
Aunque no soy contraria a este tipo de plantas de generación de energía, voy a analizar las propuestas de los nativos y otras poblaciones, aseveró.
Otro candidato presidencial, el senador Aécio Neves, del Partido de la Social Democracia (PSDB) estuvo el fin de semana en Río de Janeiro, donde visitó una favela y se comprometió a aumentar la seguridad ciudadana y los servicios sociales.
La más reciente encuesta de Ibope revela que Rousseff encabeza con 38 por ciento la preferencia del electorado, seguida por la contrincante del PSB, quien aparece con 32 por ciento de apoyo.
Neves se mantiene con 15 por ciento en la intención del voto, mientras el resto de los ocho aspirantes al sillón presidencial acumula menos del uno por ciento de soporte ciudadano.
Brasilia, 15 de septiembre 2014
Crónica Digital/ PL