El secretario general de la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), Jérôme Valcke, sostiene hoy aquí reuniones con miras a solucionar escollos pendientes cuando restan menos de 80 días para el Mundial en Brasil.
Tras llegar la víspera a esta ciudad carioca, Valcke revisará con autoridades federales y del Comité Organizador Local las obras por concluir para la Copa e insistirá en la necesidad de instalar las estructuras temporales en los estadios Corinthians, de Sao Paulo y Beira-Río, de Porto Alegre.
Los encuentros se realizarán hasta el jueves próximo, cuando el número dos de la FIFA ofrecerá una rueda de prensa para exponer sus consideraciones y los resultados de su gestión.
El principal problema radica en esas dos instalaciones, que son privadas y sus dueños se resisten a gastar más para instalar carpas, equipos de aires acondicionados, salones VIP y salas de prensa, a pesar de que el contrato firmado con el organismo internacional contempla estos requisitos.
En ambos casos, los propietarios mantienen negociaciones con las autoridades municipales y estaduales de sus territorios con el propósito de conseguir financiamientos para acatar las obligaciones de la FIFA.
Sin embargo, la entrega de fondos públicos a privados tiene que contar con el aval de las asambleas legislativas de esas jurisdicciones.
En el caso del Corinthians, cuyo estadio presentó a finales del pasado año atrasos por caída de una columna y parte del techo, con saldo de dos muertos, Valcke se reunirá este martes con Andrés Sánchez, responsables de las obras en construcción.
Las estructuras temporales elevarían los costos en 60 millones de reales (25,8 millones de dólares), en ese recinto, donde ocurrirá el primer partido de apertura de esta competencia el 12 de junio venidero.
En la otra instalación, en Porto Alegre, el club de propietarios alega falta de fondos y aguarda por una decisión legislativa de exoneración de impuestos para acatar el contrato rubricado con la FIFA.
El secretario general del organismo internacional estima que estos problemas serán resueltos y el Mundial comenzará en la fecha prevista con todos los requerimientos y condiciones previstas.
En el supuesto caso de que alguna de estas sedes, de un total de 12, no cumpla con la FIFA, será apartada de la competencia, además de pagar una millonaria multa.
Río de Janeiro, 25 marzo 2014
PL