Por lo mismo, la académica de la Universidad de Santiago, Paulina González, hizo un llamado a la mesura y a seguir preparados, porque han pasado más de 130 años desde el último gran terremoto en el Norte Grande.
“Lo del domingo en Iquique no fue más que un movimiento sísmico de mediana magnitud. Fue un temblor de 6.7 grados y nada más que eso”. Así de categórica fue Paulina González, experta en análisis sísmico de la Universidad de Santiago, al referirse al sismo que afectó a la zona norte del país y que provocó la evacuación de varias ciudades costeras.
Para la académica de la U. de Santiago, el hecho que no haya habido reportes de daños estructurales ni personales, permite decir con tranquilidad que esto “definitivamente, no fue un gran terremoto, porque en Chile, los grandes terremotos son de magnitudes superiores a 8 grados Richter”.
Sí destacó que este temblor sirvió como un gran ensayo general, ya que permitió ver cómo funciona el protocolo de evacuación en las ciudades costeras. “Hay que resolver el problema de los atochamientos que se vieron en Iquique en la zona de evacuación. Si esto ocurre en una magnitud cercana o superior a 8, el pánico será aún mayor. Ese tema hay que atacarlo a la brevedad, porque no sabemos cuánto tiempo tenemos para preparar dicho escenario”.
La experta en análisis sísmico de la U. de Santiago aseguró que el sismo de este domingo no tiene ninguna relación con los ocurridos durante ya varios meses en la zona de Pica, ya que esos temblores “tienen epicentro en la cordillera y no están asociados directamente al gran terremoto que se supone que ocurre en Iquique cada cierta cantidad de años”.
Tampoco se puede saber si el temblor de 6.7 grados Richter es precursor del gran terremoto que se espera para el norte grande, “pero si uno hace una analogía con Valparaíso, por ejemplo, nosotros identificamos sismos de una magnitud mediana entre los grandes terremotos. Así, en esta zona hubo un gran terremoto en 1906 y otro en 1985, pero entre ambos, tuvimos temblores considerables en 1965 y 1971, pero con magnitudes menores a ocho grados. Entonces, podríamos pensar que este es un evento propio de la zona sísmica del norte y que a lo mejor van a transcurrir 20 ó 30 años antes que ocurra el gran terremoto, pero no lo sabemos, porque el comportamiento particular de esa zona es distinto. No olvidemos que ha habido un silencio sísmico de más de 130 años”.
Hay que tener presente que el último gran terremoto ocurrido en el norte grande de Chile, fue el año 1877, por lo que “lo único que podemos hacer es estar preparados”, adelanta la experta de la U. de Santiago, Paulina González.
Por Pablo Véliz Torres
Santiago de Chile, 18 de marzo 2014
Crónica Digital