Ante el actual escenario en que ha quedado la discusión sobre el salario mínimo en el Parlamento, la Central Unitaria de Trabajadores desea expresar lo siguiente:
Nos parece un avance importante que la Comisión de Hacienda del Senado y luego la Cámara Alta en su sesión ordinaria hayan rechazado la propuesta del Ejecutivo en torno a un sueldo mínimo de $195.000 pues es a todas luces insuficiente y no está acorde con la realidad del país.
Creemos que esto sigue la línea trazada por la Central en cuanto le hemos solicitado a los Parlamentarios que no aprueben un sueldo mínimo inferior a los $250.000 que hemos estado solicitando desde hace ya dos meses y medio.
Sin embargo, nos parece pertinente recordar hoy que, en conjunto con esa petición a la cual muchos se comprometieron, lo que realmente estamos solicitando es iniciar una discusión de fondo, que apunte mucho más allá de una cifra que, aunque importantísima para miles de familias, no tiene una relevancia como lo que queremos que se debata: la precarización laboral, un nuevo Código Laboral, el derecho a huelga, la sindicalización obligatoria, la negociación colectiva, los fondos de pensiones, reforma tributaria, incluso una reforma constitucional.
Lo que exigimos es un debate serio e inclusivo que apunte a poner en el centro de la discusión la real situación del empleo en Chile y los verdaderos motivos del por qué tenemos una brecha salarial tan grotesca y excesiva y de por qué aún tenemos a miles de trabajadores estables que siguen siendo pobres y están incapacitados de superar esa condición. Llamamos a los parlamentarios de oposición a no caer en el juego que ha intentado sostener el gobierno junto a los partidos que lo sustentan y en cambio, se sumen a la realización de este debate junto a las organizaciones sociales y los trabajadores del país.
Ese es el debate de fondo que ya no queremos plantear, sino que exigimos que se haga y a la vez que sea inclusivo. Que se entienda que para avanzar hacia un chile más justo es fundamental escuchar a los trabajadores, a los pequeños empresarios, a los estudiantes, a los empleados públicos, a quienes realizan el doble esfuerzo de trabajar y estudiar o a quienes desarrollan un emprendimiento particular para superarse.
Esperamos que el gobierno sepa leer el mensaje que esta tarde le ha entregado el Senado, así como antes se lo hizo ver la Cámara de Diputados. No es posible continuar con esta obstinación y empantanar la discusión con argumentos que desde todos los sectores les han salido a desmentir. Chile no está en crisis; las pymes no se verán obligadas a despedir gente si se aumenta el salario a la cifra que estamos solicitando, ellos han dicho que la mayoría está de acuerdo con llegar a los $250.000. Lo que aquí tenemos es una defensa cerrada hacia la gran industria y al retail, a los mismos a los cuales la derecha ha defendido desde siempre y que hoy, estando en La Moneda, no ha hecho otra cosa que gobernar para ellos.
Por Guillermo Salinas.
Santiago de Chile, 18 de julio 2012
Crónica Digital