En términos mundiales, según el estudio de Francesca Legerber, líder global de Grant Thornton International (2019), se ha registrado un aumento de mujeres en cargos de alta dirección, en nivel ejecutivo, en Finanzas y en Operaciones, con una leve disminución en el área de RRHH. Sin embargo, este crecimiento no significa que las metas ya se han superado, sino que es solo un leve y lento aumento de la participación de mujeres en alta dirección.
¿Cuál es la situación en nuestro país y qué deben hacer las empresas para potenciar el liderazgo femenino? Olga Pizarro, Docente del Diplomado en Perspectiva de Género para las Organizaciones de Unegocios FEN Universidad de Chile, entrega sus recomendaciones.
Consecuencias de la pandemia
Olga Pizarro, comenta que, en nuestro país, la pandemia ha golpeado en general, a los cargos medios y bajos de las estructuras organizacionales, específicamente en la industria del servicio, lugar en que está la mayor parte de la mano de obra femenina. ¿La razón? en Chile, menos del 25% de las tituladas, proviene de áreas STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) según reporte INE, 2020.
Además, la experta Unegocios explica que, la participación global femenina se dice que tiene un retroceso de 10 años, según estudio de la Cepal, febrero 2021. De este estudio “la autonomía económica de las mujeres en la recuperación sostenible y con igualdad” los autores muestran el impacto que mencionabamos anteriormente respecto a los sectores involucrados, pero el efecto en la división sexual del trabajo por crisis covid, lo destacan en:
-Mujeres concentradas en sectores con mayor riesgo de contratación
-Mujeres sobrerepresentadas en primera línea de respuesta a la pandemia.
-Aumento de demanda de cuidados en los hogares
-Mujeres ocupadas en sectores de baja calificación, mayor probabilidad de pérdida de empleo por automatización.
¿Cómo se potencia el liderazgo femenino en las empresas?
Al respecto, la docente expone: “las empresas deberán capacitarse en temas de conciliación, participación femenina y enseñar las ventajas de trabajar en empresas diversas e inclusivas. El mundo ya ha girado en esa dirección, por lo tanto, al igual que la tecnología, los cambios cuestan, pero el que no se sube a este cambio quedará fuera”.
Por último, concluye que, el desafío está en incorporar el tema de diversidad e inclusión como lo antes mencionado, ya que no sacamos nada con que una empresa diga que cuenta con personas representantes de grupos diversos, si no se está trabajando de manera inclusiva.
Además, recomienda incorporar el teletrabajo como una opción real, buscando el mejor modo de trabajar, con jornadas flexibles, para la mejor calidad de vida de sus trabajadores y trabajadoras. El concepto “conciliación” es lo que se debe incorporar en las capacitaciones, esto lo deben aprender hombres y mujeres en la organización, de tal modo de lograr el equilibrio como persona.
Por Unegocios
Universidad de Chile
Santiago de Chile, 5 de abril 2021
Crónica Digital/ UNegocias