Durante una operación realizada el 11 de septiembre en la carretera nacional Falcón-Zulia, los organismos de seguridad del Estado procedieron a la captura de Jhon Heath, en compañía de personas encargadas de su traslado dentro del territorio nacional.
En la revisión del vehículo en el cual viajaban, las autoridades hallaron armamento pesado, cuatro piezas rectangulares de material explosivo C4 y dinero en moneda extranjera, así como un teléfono satelital en poder del ciudadano estadounidense, señaló el titular.
Al presunto espía se le ocuparon además fotografías de instalaciones petroleras y militares de los estados Zulia y Falcón, entre ellas la refinería de Amuay.
El fiscal general aseveró que durante las pesquisas se establecieron los vínculos de Matthew Jhon Heath a la empresa contratista de mercenarios MVM, a través de la cual cumplió varias misiones en Irak desde 2006 a 2016 como operador de comunicaciones en una base secreta de la Agencia Central de Inteligencia (CIA).
Mediante el procesamiento de la información derivada de la aprehensión de estos ciudadanos, se logró identificar a otros implicados en la operación desplegada para el ingreso irregular y traslado del agente norteamericano en territorio venezolano, con el fin de ejecutar posibles actos de sabotaje, indicó Saab.
La conspiración arrojó además indicios sobre la planificación de acciones de tráfico ilícito de drogas desde Colombia hacia Aruba a través del territorio de Venezuela.
El Estado venezolano logró neutralizar los planes para atentar contra la industria petrolera y el sistema eléctrico nacional, aseveró el fiscal general, quien repudió los planes promovidos y financiados desde Estados Unidos para generar un cambio de régimen por vías violentas en la nación sudamericana.
Caracas, 14 de septiembre 2020
Crónica Digital/PL