El candidato presidencial por el Movimiento al Socialismo (MAS), Luis Arce, denunció la sistemática violación de derechos humanos que comete hoy el gobierno de facto en Bolivia, en una videoconferencia organizada por el fundador del Grupo de Puebla, Marco Enríquez–Ominami.
Con la apuesta en el modelo económico redistribuidor del ingreso que aplicó la gestión del expresidente Evo Morales, víctima de un golpe de Estado, el candidato presidencial del MAS destacó que desde ese brazo político plantean la industrialización con sustitución de importaciones y una revolución productiva agropecuaria y tecnológica.
En su propuesta programática de gobierno también se contempla desarrollar el turismo interno mientras dure la pandemia y una serie de medidas como el impuesto a las grandes fortunas.
De ganar, en lo inmediato, señaló, “vamos a asegurar la producción de alimentos, porque luego de una pandemia como la que sufrimos hoy viene un período de hambruna y hay que tomar previsiones para que se garantice el alimento y medidas de apoyo al sector agropecuario”.
El aspirante presidencial tiene previsto un plan a corto, mediano y largo plazo que abarque la industrialización y apuesta por darles bríos a varios sectores. “Queremos tener una planta de tercera generación en tecnología, de producción de diésel a partir del reciclaje de algunos aceites y grasas animales”, adelantó.
Al ahondar en lo hecho por el MAS durante la gestión de Morales, el exministro de Economía señaló que sacaron a más de dos millones de personas de la pobreza. “Somos apenas 11 millones de habitantes y había 3,6 millones de bolivianos en la pobreza extrema”, recordó.
“Cuando asumimos en 2006 el Estado estaba en quiebra, pero desde el primer momento se trabajó para sacar el país adelante. Eso estamos proponiendo en este nuevo momento histórico del país”, concluyó.
Santiago, 11 de septiembre 2020.
Crónica Digital / Prensa Latina.