Crítica
Por Miguel Alvarado Natali
Del dramaturgo, director y guionista angloirlandés Martin McDonagh (52), Los espíritus de la isla es una de las cintas nominadas a mejor película en los premios Oscar 2023. En el 2008 estrena su primer largometraje “Escondidos en brujas” protagonizada por Colin Farrell y Brendan Gleeson, actores que McDonagh vuelve a juntar en este drama con claros tintes de comedia negra, ambientada en 1923 durante la Guerra Civil de Irlanda y cuya premisa es la enemistad de dos amigos de toda la vida.
Inisherin un pequeño poblado irlandés en una isla, donde la gente se conoce, va a misa, disfrutan del único bar, pero que de una u otra manera comienza a sufrir los efectos del aislamiento, cuestionarse su futuro y cómo recuperar el tiempo perdido en no hacer nada. Es así que un día Pádraic, (Colin Farrell) un hombre sencillo y afable, no puede aceptar que su amigo de siempre, ese inseparable, ahora no quiera estar ni hablar con él, ya que quiere dedicar su tiempo para hacer algo que perdure, como lo es la música, más si lo hace vendrán eventos inesperados y lastimosos. Colm interpretado por Brendan Gleeson, de la noche a la mañana se da cuenta que ya no puede estar cerca de su amigo, que ahora le parece aburrido, entonces decide romper con la rutina de pasar tanto tiempo con él y huye de su presencia comenzando un camino de desaires sin retorno y que lo llevará a mutilar más que una amistad.
Con actuaciones notables donde Colin Farrell sorprende y puede que sea uno de sus mejores papeles, un hombre limitado, simpático y fiel a su amistad, que no soporta perderla entrando en una obsesión frenética que no mide consecuencias. En tanto Brendan Gleeson hace un trabajo brillante, que no decae, no tranza y es todo lo contrario a Colin, desempeñando fielmente su antagonismo, con un conflicto existencial que lo lleva a esta búsqueda de encontrar un sentido a su vida, más allá de tomar unas copas con su amigo del alma y desperdiciar su tiempo. Mención especial para Kerry Condon, interpretando a la hermana de Pádraic, hace una certera y creíble actuación. Ella lo aconseja, lleva la casa y debe ser la persona más cuerda de esta isla que dejará en cualquier momento.
No quiero espoilear pero el recuerdo de Van Gogh ya en medio de la película me acompañó hasta el final, es que Los espíritus de la isla, es una cinta que te atrapa, es inesperada, sorprendente y entretenida. Aquí la atmósfera es increíble, el entorno creado en este paisaje isleño es esencial para que funcione esta obra. Tiene una narración sin apuros, como parte de lo aburrido de un pueblito en un islote, donde la trama está muy bien armada, de pronto desgarradora, en que sus personajes caen en ese abismo de tozudez sin salida. Un conflicto menor dentro de una guerra en curso lejana para esta isla sin mucha esperanza. Los espíritus de la isla nos sumerge en una enemistad sin sentido, ridícula y desoladora, cuyo enfrentamiento innecesario y egoísta se evitaba con algo tan sencillo como hablar con el amigo. El sentido de nuestra existencia se presenta en medio de esta amistad interrumpida además por el valor que va a tener el “tiempo”. Es una obra que pasa esencialmente por las emociones de sus personajes, con diálogos ágiles, el director consigue que no despegues tu mirada del telón para ver el desenlace caótico de los personajes.
Título original: The Banshees of Inisherinaka
Año2022
Duración114 min.País Reino Unido
Dirección: Martin McDonagh
Guion: Martin McDonagh
Música: Carter Burwell
Fotografía: Ben Davis
Reparto: Colin Farrell, Brendan Gleeson, Kerry Condon, Barry Keoghan, Pat Shortt, David Pearse, Gary Lydon, Jon Kenny
Santiago de Chile, 27 de febrero 2023
Crónica Digital