En un giro de 180 grados, Carabineros de Chile decidió hoy no bautizar a su Academia de Ciencias Policiales con el nombre del general Rodolfo Stange, tras recibir fuertes críticas de medios políticos y sociales.
La institución hizo el anuncio en un comunicado en el cual se señala que con ello se busca “profundizar el vínculo forjado con la ciudadanía”.
La decisión de poner ese nombre a la academia fue tomada por el general jefe de Carabineros, Mario Rozas, quien ante las críticas se vio obligado a dar marcha atrás.
Ahora, según el comunicado, la institución realizará “un proceso participativo con miembros en servicio activo y en retiro para definir el nombre de la Academia, que sea representativo de la historia, el aporte y el valor de Carabineros a la sociedad”.
El general Rodolfo Stange fue el último director general de ese cuerpo policial en época de la dictadura de Augusto Pinochet, y estuvo vinculado al “Caso Degollados”, uno de los más sonados hechos represivos de la época.
Se denominó así al secuestro, tortura y asesinato, el 30 de marzo de 1985, de los militantes comunistas José Manuel Parada, Manuel Guerrero y Santiago Nattino, caso en el cual Stange fue denunciado por los delitos de incumplimiento de deberes militares y obstrucción a la justicia durante la investigación.
La polémica reavivó las críticas hacia el general Mario Rozas, muy señalado por la represión policial durante las manifestaciones populares que se iniciaron en octubre de 2019, al punto de que el senador independiente Alejandro Guillier emplazó al presidente Sebastián Piñera a exigirle la renuncia al alto oficial.
Guillier consideró “inaceptable que en democracia se le rindan honores a Stange, integrante de la junta de gobierno de una dictadura que violó sistemáticamente los derechos humanos en Chile“.
La diputada comunista Carmen Hertz, reconocida activista por los derechos humanos, expresó indignada en su cuenta de Twitter que tal decisión resulta una provocación, y se preguntó si a los gobernantes se les olvidó que Stange fue un “encubridor de genocidas”.
En tanto, el diputado socialista Leonardo Soto consideró “incompresible la desconexión de la realidad que revela esta decisión del general director Mario Rozas”, al pretender bautizar un escuela que formará a generaciones de carabineros con el nombre de un hombre responsable de desapariciones, asesinatos y torturas.
Santiago de Chile, 21 de agosto 2020
Crónica Digital/PL