El general retirado del Ejército Luis Ramírez Pineda fue sentenciado a 18 años de cárcel por ordenar en 1973 el asesinato de dos escoltas de Salvador Allende, hasta entonces presidente de Chile.
La jueza especial Patricia González, de acuerdo con fuentes oficiales, dictaminó la condena de 15 más tres años de prisión a Ramirez Pineda por los homicidios de Wagner Salinas Muñoz y Francisco Lara Ruíz, miembros de la seguridad de Allende.
Salinas Muñoz y Lara Ruiz fueron fusilados poco después del golpe de estado de Augusto Pinochet en el regimiento de Tacna, donde el exgeneral era el comandante y dio la orden de ejecución al capitán Luis Guillermo Mena.
Al regimiento de Tacna fueron conducidos varios asesores de Allende, así como funcionarios del Palacio de La Moneda, para ser torturados y asesinados.
Los dos escoltas del mandatario defenestrado por el golpe militar eran militantes del Partido Voluntario, que como expresa su sentido, ofrecía sus servicios de manera voluntaria al dignatario.
Salinas Muñoz profesaba la religión evangélica y era bastante popular por su trayectoria de destacado boxeador aficionado, varias veces campeón de Chile, sudamericano y titular latinoamericano del peso pesado.
La semana anterior, otro juez condenó a 74 exagentes de la junta militar pinochetista por el secuestro calificado (desaparición) de un estudiante de 22 años en 1974.
Las sentencias fueron dictadas por el procurador especial Hernán Crisosto en relación con el caso del joven Ismael Chávez Lobos, militante del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR), interrogado y torturado.
Según testigos, Chávez Lobos fue llevado a un centro de detención de la tenebrosa agencia de inteligencia de Pinochet, la DINA, desde donde fue trasladado a sitio desconocido después de las torturas.
Su nombre apareció en 1975 en una lista de 119 víctimas de la Operación Colombo, un montaje de la DINA como cortina de humo a la desaparición de miembros del MIR, que supuestamente murieron como consecuencia de pugnas intestinas.
Para santiguar la versión pinochetista ante la organización que se resistió al golpe de estado con las armas, las dictaduras de la época se pusieron de acuerdo valiéndose de periódicos ficticios, Lea y O Novo Dia, de Argentina y Brasil, respectivamente.
Lea y O Novo Dia publicaron las noticias del deceso de los 119 integrantes del MIR, que luego se reprodujeron en Chile.
El juez Crisosto dictó penas de 13 de prisión a los generales retirados César Manríquez Bravo y Raúl Iturriaga Neumann y a los brigadieres Pedro Espinoza y Miguel Krassnoff Marchenko, como autores del delito.
Todos cumplen en estos momentos condenas por otras violaciones flagrantes de los derechos humanos.
También, 39 exagentes fueron sentenciados a 10 años de cárcel como autores, mientras que en calidad de cómplices otros 31 antiguos agentes recibieron penas de cuatro años de prisión.
Santiago de Chile, 23 de diciembre 2015
Crónica Digital / PL
LA JUSTICIA SE DEMORA PERO LLEGA !! YA BASTA DE IMPUNIDAD A ESTSOS ASESINOS DE ENSUCIAN EL UNIFORME!!!!!