El diputado de la Izquierda Ciudadana Sergio Aguiló (IC) dijo que el fin del sistema electoral binominal constituye una enorme victoria de todos los demócratas de Chile «porque pasaremos a tener, por primera vez después de recuperada la democracia, un sistema electoral, que permita expresar auténticamente la soberanía de los ciudadanos».
Sin embargo, advirtió que «sería de una ingenuidad imperdonable pensar que el nuevo sistema electoral proporcional, por sí solo, puede corregir el escandaloso concubinato que existe hoy entre el dinero y la política».
Al respecto, indicó que en el sistema más proporcional del mundo si no se regula con rigor el efecto del dinero, cualquier candidato millonario o apoyado por millonarios puede «comprarse» un distrito o circunscripción.
Agregó que el «caso Penta demuestra hasta la saciedad que muchos candidatos de la UDi multiplicaron por 10 o por 20 veces los recursos con que contaban sus adversarios electorales, generándose competencias tan desiguales que resultaba fácil prever el resultado de la elección».
Por eso, aseguró Aguiló «hoy es una exigencia insoslayable complementar el histórico paso que se ha dado al poner fin al binominal con la necesaria regulación del efecto del dinero en las elecciones, prohibiendo estrictamente todo aporte privado (reservado o público), institucional o personal».
Precisó que «todo candidato debe contar con un sobrio financiamiento fiscal que debe ser igual para todos los candidatos que compitan».
Del mismo modo, puntualizó que el SERVEL debe superarse hasta constituirse en una auténtica superintendencia electoral con fuertes facultades fiscalizadoras que permitan hacer exigible esta demanda democrática.
«Si estas transformaciones no van de la mano, el término del sistema electoral binominal no generará ninguno de los efectos de fortalecimiento de la democracia que la sociedad chilena tanto reclama y demanda», concluyó Aguiló
Santiago de Chile, 16 de enero 2015
Crónica Digital