La Copa Mundial de Brasil-2014 vivirá hoy una jornada especial cuando choquen las selecciones de España, campeona defensora, y Holanda, en una reedición de la final de la cita del orbe de Suráfrica-2010.
España afrontará este duelo con la responsabilidad del campeón pero con la tranquilidad de saberse superior, mientras los holandeses, aunque lo nieguen a muerte, buscarán una victoria por todos los medios para tomar revancha de la derrota en el partido por el título en tierras surafricanas.
Más allá de intenciones y aunque habrán menos tensiones que hace cuatro años, ambos equipos necesitan sumar puntos en este desafío porque nunca pueden obviar la presencia en este grupo B de la potente selección de Chile, que chocará hoy contra Australia.
Los monarcas regentes dependerán, como hace varios años, de la funcionalidad de sus centrocampistas, aunque en esta ocasión contarán con una nueva pieza en el puzzle, el delantero brasileño Diego Costa, quien prefirió defender los colores de España antes de los de su país natal, en una decisión controvertida en extremo, que sin duda lo hará vivir momentos agridulces en los próximos días.
Si Costa logra insertarse eficientemente en el esquema del entrenador Vicente del Bosque entonces los dos veces campeones de Europa ganarán en potencia, velocidad y juego al espacio, amén de la rudeza que aportará el atacante a la hora de enfrentar físicamente a sus adversarios.
No tenemos miedo a nada, estamos en plenitud, advirtió Del Bosque a modo de desafío, aunque también para defender a jugadores como Xavi Hernández y Xabi Alonso que no viven sus mejores momentos desde hace varios meses.
Holanda, por su parte, también dependerá de jugadores de élite, pese a la renovación llevada a cabo por Louis Van Gaal, antes de avisar que dejaría la selección de los tulipanes para firmar por el Manchester United.
España es la primera en táctica, en técnica y en físico, declaró Van Gaal, un adorador confeso del modelo de La Roja.
Arjen Robben y Robin Van Persie comandarán el enésimo asalto holandés al trono mundial, acompañados por otros grandes futbolistas como el ahora díscolo Weslei Sneijder, Klaas Jan Huntelaar o Dirk Kuyt.
El escenario de esta gran batalla será el Arena Fonte Nova de Salvador de Bahía (oficialmente Estadio Octávio Mangabeira), donde habrán temperaturas de alrededor de 26 grados celcius y humedad relativa de 79 por ciento.
La pelea por el primer lugar de este grupo B será brutal porque el segundo clasificado chocará en octavos de final contra la poderosa escuadra anfitriona de Brasil, mientras el ocupante del primer lugar se las verá contra un oponente mucho más asequible.
Por Yasiel Cancio Vilar, enviado especial
Río de Janeiro, 13 junio 2014
Crónica Digital / PL