Los presidentes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) censuraron a los gobiernos de Italia, Francia, Portugal y España por su agravio al presidente Evo morales “que ofende no solamente al pueblo boliviano, sino a todas nuestras naciones”.(RadioPL)
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La fuerte condena a esas potencias miembos de la Organización del Atlántico Norte (OTAN) está contenida en una declaración firmada anoche en esta ciudad bioliviana por los mandatarios de Argentina, Cristina Fernández; Uruguay, José Mujica; Venezuela, Nicolás Maduro; Ecuador, Rafael Correa; y Suriname, Desiré Bouterse.
Los presidentes de Perú, Colombia, Chile y Brasil, quienes no pudieron participar en esta cumbre extraordinaria de la Unasur en Bolivia, también expresaron su condena al agravio sufrido por Evo Morales en Europa.
El texto de la declaración de este organismo de integración, reunido en Cochabamba, denuncia ante la comunidad internacional y sus diferentes organismos “la flagrante violación de los tratados que rigen la convivencia pacífica, solidaridad y cooperación entre nuestros Estados”.
La declaración condena “el atropello y las prácticas neocoloniales que aún subsisten en nuestro planeta en pleno siglo XXI”.
También resalta la falta de transparencia sobre las motivaciones de las decisiones políticas que impidieron el tránsito aéreo de la nave ejecutiva boliviana y con el presidente Morales a bordo.
En el documento, los mandatarios de Unasur expresaron su rechazo a “las prácticas ilegales de espionaje que ponen en riesgo los derechos ciudadanos y la convivencia amistosa entre las naciones”.
Por otra parte, declararon inaceptable “la restricción a la libertad del presidente Evo Morales, convirtiéndolo virtualmente en un rehén”.
Esa acción “constituye una violación de derechos no solo al pueblo boliviano, sino a todos los países y pueblos de Latinoamérica y sienta un peligroso precedente…”.
En otro de sus acápites, el texto rechaza “las actuaciones claramente violatorias de normas y principios básicos del derecho internacional, como la inviolabilidad de los jefes de Estado, en tanto exige a los gobiernos de los países mencionados explicar las razones de su decisión.
Asimismo, la declaración respalda la denuncia presentada por Bolivia ante el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
Cochabamba, Bolivia, 5 julio 2013
Prensa Latina