En su habitual programa radiotelevisado dominical Aló Presidente, en esta ocasión transmitido desde un plan habitacional en marcha cerca de la capital, Chávez puntualizó que será el pueblo quien decida si se aprueba o no ese proyecto.
Dentro de poco entregaré mi propuesta, si producto de eso el pueblo me echa de aquí, no tengo problema. El día que el pueblo no me quiera no voy a ponerme a llorar, me voy, expresó el mandatario venezolano.
Chávez puntualizó que aunque tiene una idea clara de los cambios que propondrá, se ha demorado en presentarlos al órgano legislativo debido a la recepción de diversos proyectos elaborados por expertos y asesores.
Puntualizó que el proceso previo incluyó una revisión artículo por artículo de la Constitución, pero ya se está dando los troques finales a la iniciativa.
En relación con la propuesta de la posibilidad de elección presidencial continua o indefinida (sin límite de períodos) aclaró que se trata sólo para ese cargo y no para gobernadores y alcaldes como han sugerido algunos partidos de izquierda.
“Yo haré lo que el pueblo diga, no un grupito ni otro” apuntó el presidente venezolano, al ratificar que los cambios, una vez aprobados por la Asamblea Nacional, serán llevados a un referendo nacional.
Ratificó asimismo que se prevé reinstalar, renovada, la figura del Distrito Federal para Caracas, así como territorios y ciudades federales y territorios comunales para terminar con la dispersión facilitada por la actual división política administrativa.
Chávez indicó que esa estructura fomenta la formación de caudillos regionales, con métodos ajenos al proyecto de integración nacional.
Caracas, 22 de julio 2007
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