Con 35 años, de profesión Programador y Diseñador Web y con estudios en Filosofía y Religión en la Universidad Católica del Maule y Licenciatura en Filosofía en la Pontificia Universidad Católica de Chile.
Dirigente estudiantil del FEI en la UC a comienzos del 2000 y dirigente secundario de la Feses de Maipú a fines de los 80.
Crónica Digital, conversó con el dirigente para recabar mas información sobre el un torneo que marcará el rumbo a un sector importante de la izquierda chilena.
-¿Cuáles son los objetivos que se propone el Congreso Nacional de la IC?
El segundo Congreso Nacional de la Izquierda Cristiana viene mandatado para ser un congreso de carácter refundacional, amplio y abierto.
La necesidad de ello radica en que desde la fundación de la IC, en octubre del año 1971, no ha habido al interior del partido un proceso de reflexión teórica y programática que dote a la IC de una línea ideológica y política que pueda dar respuesta a estos tiempos.
El primer Congreso que hizo la IC es en año 1978 y por ello es hecho en plena clandestinidad. Bajo esas circunstancias no existieron las condiciones necesarias para abordar temas de índole ideológico. Si bien fue un congreso muy valiente, fue asimismo limitado, y desde entonces han pasado cerca de 30 años. En tanto tiempo la realidad de nuestro país, del continente y del mundo ha cambiado ostensiblemente.
-Entonces el Congreso tiene un marcado acento ideológico, ¿Cómo pretenden ustedes realizar un evento de estas características en tiempos que las ideologías parecen estar en retroceso?
En la IC hemos convenido en que es indispensable una actualización ideológica, y precisamente por esto es que no partimos de cero. Cuando se funda la IC nos dimos bases ideológicas a partir de raíces que nos origen e incorporamos elementos de la época de manera original.
Durante estos 35 años hemos ido incorporando perspectivas y sensibilidades que nos han aportado nuevas miradas y que demandan ser explicitadas e incorporadas a nuestra matriz de principios y fundamentos.
Ahora bien, ciertamente estamos en un periodo en que las ideologías revolucionarias y anticapitalistas están venidas a menos en tanto la ideología del neoliberalismo y el individualismo se han erigido como el modelo dominante de pensamiento y producción de la vida a nivel mundial.
Sin embargo, nosotros tenemos la convicción de que hemos forjado una identidad a lo largo de estos años, una identidad que creemos tiene respuestas vigentes y que están en franca oposición al sistema. Es más, consideramos que hemos sido capaces de preservar una ética política y un compromiso con la transformación de la sociedad que hoy consideramos que es necesario fortalecer, actualizar y profundizar para poder enfrentar de mejor manera estos tiempos.
-¿Esas bases ideológicas radican en el cristianismo?
Primero que nada es preciso aclarar algo, la IC no es un partido religioso ni confesional, no es un partido de creyentes, no tenemos un compromiso ideológico con las bases doctrinales de ninguna iglesia ni somos una corriente espiritual ni nada de eso.
Sin perjuicio de lo anterior, la IC se declara como un partido de inspiración cristiana, en tanto fundamento ético y de valoración del ser humano desde una perspectiva de trascendencia.
Pero yo diría que en la IC, tanto en su inicio como en su historia reciente han convergido reflexiones y miradas que la han dotado de un acervo ideológico novedoso. En donde el cristianismo es uno de ellos, pero que en la sinergia que te explico, ha devenido en ser uno de los tantos pilares que nos sirven de base.
-Estamos de acuerdo, pero .
Déjame explicar esto un poquito más. La IC surge como una postura de izquierda al interior de la DC en los tiempos que empezaba la Unidad Popular para generarle una base de apoyo desde la DC. El nombre de Izquierda Cristiana lo obtiene de establecer una distinción necesaria al interior del PDC.
Al nacer la IC yo diría que ésta se lleva consigo las posturas más radicales que en algún momento tuvo el PDC en aquellos años, me refiero a la tesis del socialismo comunitario y del desarrollo no capitalista.
En ese mismo periodo la IC se nutre además de una reflexión muy latinoamericana que empieza a contagiar a diversas disciplinas en el continente, me refiero a la ideología liberacionista, que interviene en esos años notablemente en la teología con Gutierrez y Boff, en corrientes pedagógicas como las de Paulo Freire, que se inspira en la experiencia de la revolución cubana y las reflexiones que hace el Che Guevara, que también se despliega en ámbitos académicos como en Colombia, en donde aparece una sociología de la liberación de la mano de Camilo Torres y Orlando Fals, y de muchas otras manifestaciones.
Esta corriente influye mucho en la IC, tanto así que me atrevería a decir que la Izquierda Cristiana de Chile es la expresión política del liberacionismo latinoamericano.
-Pero hoy en día, aparte de ustedes, estas corrientes tienen algún otro exponente políticamente hablando?
Yo estimo que sí, pero antes quiero cerrar lo que te decía para poder responder tu pregunta. La inspiración cristiana, las corrientes liberacionistas, junto a la postura radical del socialismo comunitario formaron parte del origen de la IC, pero durante estos 35 años nos hemos nutrido además de otras corrientes como lo son el ecologismo en su expresión más sociopolítica, del feminismo en su crítica al sistema dominante del patriarcado y a corrientes de índole libertarias.
Todo esto es lo que hoy la IC va a poner en diálogo, y es lo hoy se debe refrendar como base ideológica en tanto su vigencia y actualidad nos sirva. Ahora bien, si estas corrientes tienen hoy algún tipo de expresión política ciertamente que sí, las podemos ver en la experiencia boliviana, en donde el socialismo comunitario está siendo incorporado como una forma de entrelazar a la sociedad y al pueblo en torno a la gestión de su economía y modo de vida.
Por otro lado Venezuela está activando un proceso comunitario y cooperativo muy consistente, ahí la revolución bolivariana está produciendo un proceso de transferencia de los recursos y el poder a las iniciativas comunitarias organizadas
Estas posturas que te señalaba son las bases de una ideología liberadora, espiritual y popular. En síntesis yo diría que la IC lucha contra la dominación y la explotación del hombre, de la naturaleza y el genero, considera al ser humano como un sujeto con necesidades espirituales y lo ve como un ser trascendente, y levanta al poder popular como medio para empoderar a la ciudadanía para que sea ella misma la que tenga el poder político, económico y social.
-El Congreso va a resolver sobre otros temas, ¿van a legalizarse como partido al final de éste?
El mandato para realizar este Congreso nos obliga a realizar definiciones sobre tres áreas, tenemos que hacer una reflexión ideológica, una de carácter programático y una de carácter organizacional.
En esta última es donde resolveremos sobre la estructura definitiva del partido, los mecanismos de representación interna y desde luego sobre la legalización.
En el sitio web del congreso se habla de la inscripción instrumental e incluso de cambiarle nombre al partido, ¿es eso tan así?
Sobre legalizarnos como IC o como un partido instrumental eso es materia del congreso. A nosotros nos importa que este congreso sea un evento amplio y abierto.
En esa apertura buscamos dialogar con otros actores y sujetos que al igual que nosotros crean que es necesaria una fuerza política de nuevo tipo en el escenario nacional.
Hoy en día hay muchos colectivos y movimientos que buscan una expresión política y nosotros estamos llanos a incorporarlos al debate de nuestro congreso, este no es un congreso sólo entre militantes, es un congreso de la IC con la gente, con la comunidad, queremos que sea la gente la que nos ayude a construir esta alternativa.
Si en esa discusión surge la necesidad de inscribirnos mediante un partido instrumental o federado entonces lo haremos, pero teniendo en cuenta quienes somos, nuestra identidad y nuestra base ideológica, pero eso es materia de congreso.
En lo que a mi y a la comisión de Congreso nos toca es a garantizar la mayor amplitud y participación posible para hacer de este evento un hito en la historia política de Chile.
-¿Y sobre cambiar el nombre a la IC?
Eso es materia del Congreso y a mi no me corresponde pronunciarme, pero al ser este un Congreso refundacional, eso, si es propuesto, puede ser discutido. Ahora si va a tener éxito eso es otra cosa, pero puede ser planteado. No obstante eso, nosotros consideramos que la continuidad de la identidad política y cultural de la IC no está en cuestión, tenemos la convicción de que siempre habrá una IC en Chile.
-Con respecto al Juntos Podemos Más, ¿piensan hacer el Congreso en conjunto con ellos con orgánicas que se sienten atraídas por la IC?
Este es un Congreso de la IC, si bien es cierto formamos parte del JPM sabemos que representamos una sensibilidad propia y particular y la invitación es a quienes se sientan cercanos a esta sensibilidad.
En el JPM hay partidos y corrientes que tienen su historia y cuento propio y que forman parte del mundo de las izquierdas hoy en día. El debate y la reflexión lo haremos con la gente de izquierda que esté interesada en formar parte de nuestro proyecto y tanto dentro como afuera hay actores que nos interesan que nos aporten.
¿Cómo quiénes?
Nosotros consideramos que compartimos con mucha gente sensibilidades comunes, criterios y formas de hacer política y que además compartimos la necesidad de que es importante fortalecer una alternativa política de nuevo cuño en la izquierda.
Hemos hecho un largo camino y no lo hemos hecho solos, hay mucha gente que ha caminado al lado nuestro y es a esa gente que queremos invitar a participar de nuestro congreso.
Estamos en una etapa de precongreso actualmente y en ella estamos teniendo conversaciones con diversas personas y colectivos para invitarlos a participar pero por ahora no te podría decir quienes participaría, pero si quiénes me gustaría que nos acompañaran en este proceso.
En ese sentido, por ejemplo, hemos visto con muy buenos ojos la iniciativa del Unir, esta convergencia que agrupa a G80, oveja negra e izquierda XXI. Creemos que ahí se manifiesta una clara intensión unitaria y de nuevo tipo y considero que ellos nos pueden aportar mucho en este proceso como nosotros también a ellos.
Sería una experiencia interesante poder contar con ellos en nuestro congreso junto con el aporte de otros actores importantes para nosotros, como lo son las comunidades evangélicas, grupos feministas, ecologistas, gente que no milita en ningún partido y que por diversas razones tiene confianza en nosotros.
-¿Existen plazos y fechas?
El Congreso comienza, en su primera etapa, el 15 de junio, el cual comprende la discusión de bases, comunales y frentes, esto dura hasta finales de agosto. Durante septiembre realizaremos síntesis regionales y tenemos fijado para el 7, 8 y 9 de octubre la plenaria final.
Por ahora estamos en la etapa de precongreso preparando logísticamente a los comunales y frentes, elaborando documentos y difundiendo nuestro congreso, para ellos habilitamos un sitio web en www.izquierdacristiana.net/congreso
Si todo sale bien, el 24 de octubre estaremos presentando al país una IC que contribuya de mejor manera a la transformación de la sociedad y a ser una alternativa para los espíritus libres, socialistas y revolucionarios de Chile.
Por: Francisco González
Santiago de Chile, 29 de mayo 2006
Crónica Digital, 0, 137, 3