La Asociación Alemana de Fútbol (AAF), fundada en 1900, cuenta con 6,3 millones de miembros agrupados en cerca de 27 mil clubes, la quinta parte de ellos con menos de 14 años.
La Bundesliga, liga de fútbol profesional, atrae una media de 10 millones de espectadores por temporada.
Desde los primeros partidos, el 24 de agosto de 1963, la Bundesliga creció en renombre internacional y se convirtió en un componente de la vida del país.
Los equipos más importantes, como el Borussia de Dortmund, el Schalke 04 y el Bayern de Múnich, registran una asistencia media de 60 mil personas por partido.
La AAF organizará por segunda vez en la historia una Copa Mundial de la FIFA -la otra fue en 1974, cuando el once anfitrión resultó campeón-, en la cual 32 equipos diputarán el más añorado título en este deporte.
En contraste con Alemania 2006, en 1974 sólo compitieron por el nuevo trofeo del certamen de la FIFA 16 selecciones.
Sin embargo, más de 1,8 millón de espectadores presenció los 38 partidos en nueve ciudades, lo que dio una media de 46 mil 685 asistentes a cada encuentro.
Los germanos conservan la imagen del tanto de la victoria de Gerd “Torpedo” Muller sobre Holanda en la final (2-1).
En lugar del trofeo Jules Rimet, definitivamente entregado a Brasil después de su tercer triunfo en México 70, los ganadores del torneo recibirían a partir de entonces la nueva Copa Mundial de la FIFA.
Otra novedad en Alemania 74 fue el sistema de eliminatorias, que anteriormente se había usado tras la primera ronda de grupos, reemplazado entonces por una segunda liguilla.
Además, el torneo sería íntegramente retransmitido por televisión a todo color por primera vez en su historia.
El recién elegido presidente de la FIFA, el brasileño Joao Havelange, dio la bienvenida a los 16 equipos que acudieron a Alemania. Habían participado 98 en la competición preliminar.
Entre los 16 aspirantes a la Copa Mundial de la FIFA figuraban debutantes como la República Democrática Alemana (RDA), Haití, Australia y Zaire, primera nación subsahariana en alcanzar una fase final.
Si la lid de 1970 fue un monumento al brasileño Pelé, el torneo de 1974 en Alemania siempre se recordará por el holandés Johan Cruyff y el germano Franz Beckenbauer, dos de los más grandes futbolistas de todos los tiempos.
Santiago de Chile, 24 de mayo 2006
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