Se trata de la primera uniformada que denuncia lesbofobia. Tras reunirse con ella, el Movilh solicitó la intervención del Departamento de Derechos Humanos de Carabineros.
Una policía que se desempeña en una comisaría de la Región Metropolitana denunció constantes acosos en razón de su orientación sexual por parte de un superior, por lo que el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) solicitó la inmediata intervención del Departamento de Derechos Humanos de Carabineros.
La vocera del Movilh, Daniela Andrade, precisó que “siempre hubo rumores sobre la orientación sexual de la policía, por lo que ella le comentó a su superior, un mayor, que es lesbiana y que tiene planes de contraer la unión civil con su pareja del mismo sexo”.
Añadió que “en el marco de declaraciones a todas luces contrarias a la dignidad humana, el superior señaló que él no discrimina. Sin embargo, dijo que no está de acuerdo con que las personas del mismo sexo se casen y, menos que tengan hijos.
También le señaló a la carabinera que no toleraba las expresiones de afecto de las personas del mismo sexo en la vía pública como tomarse de la mano, porque ello se ve mal y porque jamás permitiría que sus hijos presenciaran algo así”.
Más grave, añadió la vocera del Movilh, el superior “ha dejado entrever que la funcionaria, sólo por ser lesbiana, podría abusar de otras mujeres. En ese sentido, explícitamente le ha advertido que ante cualquier reclamo de una mujer contra ella , cito textual, “te voy cagar””.
“Como si fuera poco, la funcionaria fue notificada en medio de estos acosos homofóbicos que podría ser trasladada, justo cuando confidenció que tiene una relación de pareja y con planes de unirse civilmente. Se trata de un abuso intolerable, que afecta su estabilidad emocional”, apuntó Andrade.
Tras reunirse con la cabinera, el Movilh denunció al hecho a la Directora del Departamento de Derechos Humanos de Carabineros, Karina Soza.
“Solicitamos a usted que impida el traslado de la carabinera, y que se le garantice un trato digno y libre de abusos”, señaló la misiva del Movilh enviada a Soza.
Añadió que “la funcionaria ya confidenció su orientación sexual a su compañeros/as de trabajo, por tanto un traslado, la obligaría a vivir este proceso de nuevo en el lugar donde sea derivada, sin garantías de que ello no le acarreará otros problemas, abusos y traumas que afecten la estabilidad emocional, tan necesaria para su calidad de vida y para el buen desempeño laboral en la institución”.
Andrade puntualizó que “la carabinera ha decidido, al menos por ahora, mantener en total y absoluta reserva su identidad y detalles del caso, sin embargo, consideró necesario que diésemos a conocer estas formas de discriminación para alertar al alto mando, sensibilizar a la ciudadanía y, en especial, para dar una señal de compañía a otras mujeres que pueden estar viviendo lo mismo al interior de las Fuerzas Armadas, de Orden y de Seguridad”.
Santiago de Chile, 14 de julio 2016
Crónica Digital