“Apoya, no castigues” es una campaña a nivel mundial que tiene como objetivo promover reformas a las políticas de drogas basadas en el prohibicionismo, además de impulsar cambios en aquellas legislaciones que dificultan o impiden el acceso a las intervenciones de reducción de daños. Es por ello que Fundación Daya, junto a organizaciones pro cannábicas como Movimental, Cultiva Tus Derechos Valparaíso y Cáñamo, han decido sumarse a esta manifestación que se llevará a cabo en todo el planeta el próximo lunes 26 de junio.
Para manifestar su apoyo, las organizaciones ya señaladas invitan a la comunidad en general a reunirse frente a la Embajada de Filipinas a mediodía del próximo lunes, como una forma de visibilizar la terrible situación de violación a los DD.HH que el Presidente de ese país, Rodrigo Duterte, ha generado con su política anti drogas producto de la cual ya han sido asesinadas más de 7.000 personas, la mayoría de ellos usuarios responsables de diversas substancias.
Rodrigo Duterte fue elegido como presidente de Filipinas en mayo de 2016 con un 39% de los votos. Conocido como “El Castigador”, el presidente filipino prometió en su discurso de investidura, matar a más de 100 mil personas relacionadas con las drogas, llegando a exhortar a los ciudadanos a tomar las armas para acabar no sólo con los traficantes del país asiático, sino también con los consumidores.
En este contexto, en octubre de 2016 se inició una campaña internacional organizada por el Consorcio Internacional de Políticas de Drogas (IDPC), ante la cual Fundación Daya, Movimental y Revista Cáñamo adhirieron, realizando una manifestación pacífica el 12 de octubre de 2016 frente a la Embajada de Filipinas en la comuna de Las Condes.
Los representantes de las organizaciones chilenas, entregaron una carta dirigida hacia el Cónsul General, Marcos Tunsalang, en la que se exhortaba al gobierno filipino a detener las constantes violaciones a los Derechos Humanos que afectan a los usuarios de substancias en ese país.
En la ocasión la directora ejecutiva de Fundación Daya, Ana María Gazmuri, expresó que “no podemos dejar de conmovernos ante esta situación, porque es una señal para que transformemos por completo la mirada con que estamos desarrollando las políticas de drogas. La problemática de drogas no se resuelve con matanzas extrajudiciales; hay tratados internacionales que exigen que haya un debido proceso”.
Por su parte el Coordinador General de Movimental, Nicolás Espinoza, sostuvo que “la política de Filipinas lleva al extremo la crueldad que significa el prohibicionismo para la sociedad actual. Nos parece gravísima la persecución que se está realizando en el país asiático, porque probablemente esto va a dar pie a que se empiece a normalizar la matanza con otras razones, ya sea raciales, étnicas, religiosas”.
La situación es de tal gravedad, que la Organización de las Naciones Unidas (ONU), solicitó detener los métodos adoptados por el gobierno filipino para acabar con el narcotráfico.
En esa misma línea, la campaña “Apoya, no castigues” postula que el sistema prohibicionista del control de drogas es improductivo y necesita reformas. Que las personas que consumen drogas no deben ser criminalizadas y que quienes participan en el comercio de drogas a niveles bajos, especialmente aquellos que lo hacen por razones de subsistencia o coerción, no deben enfrentar castigos desproporcionados. Además señala que las políticas de drogas deben centrarse en la salud y reducción de daños en lugar de la represión.
Santiago de Chile, 21 de junio 2017
Crónica Digital