Miembros del equipo negociador de las guerrilleras Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) expresaron hoy aquí su deseo que el impase en las conversaciones de paz sea resuelto para que el proceso avance hacia el acuerdo final.
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“El proceso de paz, cuyos avances han activado la esperanza de la reconciliación, no puede arriesgarse con determinaciones impulsivas”, indica un comunicado del grupo guerrillero, leído por el negociador Pastor Alape, en conferencia de prensa en el capitalino Palacio de las Convenciones.
La fuerza insurgente manifestó su sorpresa por el anuncio del presidente Juan Manuel Santos de suspender las conversaciones de paz de La Habana.
En la misma sede de las pláticas de paz que sostienen delegados del gobierno colombiano y las FARC-EP en esta capital desde noviembre de 2012, Alape aseveró que “queremos que este impase sea resuelto lo más pronto posible para que el proceso siga avanzando sin sobresaltos hacia el acuerdo final”.
Señaló que la posición de dialogar bajo el fuego, cada día arrastra mayor insensatez y agregó que para asombro del mundo, esta decisión la toma un gobierno que ha negado, tozudamente, la posibilidad de que el proceso de paz se desenvuelva en medio de una tregua o armisticio que ayude a desescalar el conflicto.
Tras sostener que esperan el cese de las incoherencias del gobierno, las FARC-EP afirman que continuarán en La Habana trabajando por la paz y dispuestos a continuar los diálogos, atendiendo a lo convenido en el Acuerdo General de La Habana, donde se establece que las “conversaciones serán directas e ininterrumpidas”.
A una pregunta de la prensa, Alape respondió que hasta ahora carecen de información sobre el presunto secuestro del general Rubén Darío Alzate por parte de uno de los frentes de las FARC-EP.
El presidente colombiano suspendió el viaje a Cuba del equipo gubernamental hasta tanto se aclare la situación de la desaparición de Alzate este domingo.
El mandatario escribió en su Twitter que tras una reunión con la cúpula militar ordenó suspender el viaje de los negociadores a La Habana, hasta aclarar la situación del general Alzate y sus acompañantes.
En mensaje anterior por igual conducto, Santos informó que le dio instrucciones al titular de Defensa para que se traslade al departamento del Chocó y personalmente asuma la investigación sobre lo que llamó el secuestro del alto oficial.
Santos también pidió explicaciones al Ministerio de Defensa, pues Alzate rompió todos los protocolos de seguridad y vestía de civil en la denominada zona roja.
El conflicto en Colombia ha dejado alrededor de 6,5 millones de víctimas, entre ellas más de 200 mil muertos, por lo que resulta crucial para lograr la paz encontrar los mecanismos para su reparación y asegurar la no repetición de esos hechos.
Con Cuba y Noruega como garantes y Venezuela y Chile como países acompañantes, estas conversaciones ya lograron consensos en los puntos de reforma rural (mayo de 2013), participación política de las FARC-EP (noviembre de 2013) y drogas ilícitas (mayo de 2014).
La Habana, 18 de noviembre 2014
Crónica Digital / pl